Costumbre de ir al cementerio
El primer día del onceavo mes del año, se celebra el Día de Todos los Santos, una festividad con origen religioso que pretende homenajear la labor y la fe de los santos. Este día tiene la tradición de ir al cementerio, pero no es el Día de los Muertos, por lo que, surge el dilema del porqué se hace.
Cada 1 de noviembre, millones de personas van al cementerio a velar por sus seres queridos, ya fallecidos. Desde los orígenes del propio ser humano, es bien conocida la necesidad que tiene de expresar sus emociones, y este día es perfecto para rememorar los tiempos con las personas que ya no están con nosotros, desde hermanos, padres o hasta el amor de tu vida.
La tradición de llevar un ramo de flores al cementerio está muy extendida en nuestro país, pero no somos el único sitio donde se realiza esta acción. Por una parte, es símbolo de respeto y por otro lado, forma parte nuestra forma de llevar el dolor de la pérdida.
Un día para ir al cementerio
En Israel data los primeros registros de esta costumbre. En la Edad de Piedra, hace 15.000 años, se descubrió que los primeros agricultores habían dejado un par de plantas al lado de los cuerpos. Aunque, no se sabe la razón exacta para tal acto, los restos encontrados yacían junto a estas flores, que colocaron específicamente en forma de cama.
Además, este pueblo conocido como natufienses, fueron pioneros en la construcción de cementerios para los cuerpos, puesto que, hasta ese instante, se solían enterrar en fosas comunes.
