Patricia Conde vivió en sus propias carnes el horror de Masterchef
Masterchef se ha vuelto a coronar en España y no precisamente para bien. Tanto el jurado como los miembros de la edición ‘Celebrity’ están en el punto de mira por cómo se comportaron con Patricia Conde en la prueba anterior a la final de la séptima edición. Un comportamiento que vuelve a mostrar la triste y oscura realidad del mundo Masterchef, donde tantas personas no solo han sentido decepción con el programa, si no que también han salido del mismo con bastantes inseguridades y problemas relacionados con la ansiedad por la presión y la poca humanidad que hay en el mismo.
Patricia Conde ha sido la última víctima del mundo Masterchef y es que, la presentadora y actriz vallisoletana sufrió en sus propias carnes el horror del conocido programa de cocina donde Samantha, Jordi y Pepe también son culpables. Después de que, Veronica Forqué, saliera bastante ‘tocada’ mentalmente de la pasada edición ‘Celebrity’ por el constante bullying que sufrió por parte del programa y de parte de sus compañeros parece que Masterchef no ha aprendido la lección y prefieren seguir machacando mentalmente a sus concursantes.
La salud mental sigue sin importar en Masterchef
La actriz, Patricia Conde, que quedó cuarta en la presente edición de Masterchef, se vio superada en la prueba previa a la final de la séptima edición ‘Celebrity’. La vallisoletana se vio superada desde el primer momento al bloquearse en la cocina, llegando incluso a pedir salir de las mismas para ‘tomar un poco de aire’ por los niveles de ansiedad que estaba sufriendo. Una situación límite en la que Patricia Conde demostró no estar al 100% para competir al sentirse bastante agobiada, pero lejos de comprenderla, tanto Jordi Cruz como Samantha Vallejo-Nájera le hicieron chantaje emocional para que siguiera ‘dando espectáculo’.
Una vergonzosa situación la que tuvo que vivir Patricia Conde mientras vivía un ataque de ansiedad, viendo como todos a su alrededor minimizaban como se sentía y a mayores la juzgaban por ‘no luchar hasta el final’. La actriz, al finalizar la prueba, recibió una vergonzosa reprimenda por parte de Jordi Cruz donde le repitió en varias ocasiones que le había decepcionado y que otros se habían merecido estar en el puesto que estaba ella.
Una situación que demuestra, sin duda alguna, que la salud mental sigue sin importar en Masterchef. Pese a los problemas que han tenido varios concursantes en este programa, prefieren seguir ‘machacando’ para dar ‘show’ que preocuparse por la salud y el estado de los mismos, y esta es la realidad de este programa blanqueado pero bastante oscuro.