La sede de Gas Natural Fenosa de Valladolid cuenta desde hoy con un equipo de carga lenta de GNC (Gas Natural Comprimido) que suministrará energía sostenible a la flota de vehículos de la compañía.
Se trata del primer punto de carga lenta para vehículos ligeros en funcionamiento en Castilla y León. El nuevo punto de carga lenta fue instalado en Valladolid y permite el llenado de un vehículo de GNC con depósito de 15 kg entre 8 y 11 horas.
Según Gas Natural Fenosa «es un paso más en su reto medioambiental de reducir el impacto en el entorno y mejorar la calidad del aire de nuestras ciudades».
Las estaciones de carga de GNC tienen como objeto comprimir el gas, almacenarlo en depósitos (en algunos casos) y posteriormente suministrarlo. En el mercado existen dos tipos de estaciones de carga: lenta y rápida.
Para la carga de autobuses urbanos y pequeñas flotas se puede utilizar el sistema de carga lenta, también denominada carga en parking, para aprovechar el tiempo de reposo del vehículo durante la noche. Este sistema de carga minimiza la inversión inicial en equipos y no precisa atención del conductor para realizar la carga, ni tampoco depósitos finales de almacenamiento en la estación.
Ventajas económicas y medioambientales del gas natural comprimido
El GNC es el gas natural comprimido utilizado como carburante para vehículos a motor. Su principal componente es el metano (CH4) en un 91-95%. Entre sus múltiples ventajas medioambientales destacan las emisiones casi nulas de NO2 y de partículas sólidas PM10, determinantes en la calidad del aire. Además, evita un 30% de las emisiones de dióxido de carbono y no emite dióxido de azufre.
Respecto a la contaminación acústica, los vehículos impulsados con gas natural producen un 50% menos de ruidos y menores vibraciones que uno diésel. Este factor tiene especial interés en las flotas que realizan trabajos nocturnos como son los camiones de recogida de residuos.