Un nuevo servicio se ha inaugurado en las calles leonesas. Se trata de una ducha pública que ofrece una inigualable ducha a todo el viandante que se atreva a utilizarla. Un buen chorro de agua de lluvia, o quizá agua de lavar la ropa, remoja a todo el usuario que se ponga debajo de este canalón. Una obra de «ingeniería» única que sobresale en la ciudad de León.
Se trata de un invento realmente original creado para arreglar el «fiasco» de una piscina en una galería. Cosas que pasan cuando se bloquea una bajante de agua comunitaria y se intenta convertir la galería de un piso en una auténtica piscina olímpica capaz de acoger los 100 metros brazas de las Escuelas Municipales.
Una ducha pública mejor que la del gimnasio
En esta época en la que es obligado el abrocharse el cinturón y ahorrar en suministros y diferentes servicios, no es de extrañar que las colas se formen en este punto de León, localizado en la céntrica calle Juan Lorenzo Seguro, para disfrutar de una ducha matutina. Ahora ya no es necesario exprimir el agua de la ducha del gimnasio, se puede hacer en esta céntrica calle.
Sin duda, una instalación que no deja a nadie indiferente. También existe un proyecto para promocionar el lugar como lugar de pruebas de paraguas. Un lucrativo fin que podría dar beneficios tanto a los inquilinos como al inventor del artilugio.