Una sucesión interminable de instituciones nacional e internacionales, públicas y privadas cuestionan los presupuestos de Pedro Sánchez. De hecho, aún no ha aparecido nadie, que no sea el propio gobierno, para dar por buenas estas cuentas, pero Moncloa insiste en su defensa.
El gobierno defiende los presupuestos de Pedro Sánchez
Isabel Rodríguez, portavoz del Gobierno, ha declarado que «estamos en el lado correcto, acompañando y liderando el proyecto europeo» y ha añadido que «afortunadamente en el contexto europeo, y España está liderando esas políticas, hoy hay un convencimiento de que de estas circunstancias hemos de salir unidos protegiendo a la mayoría y que para eso lo público es fundamental».
El Gobierno dice que los presupuestos son los adecuados y se ha iniciado la tramitación en el Parlamento, pero justo ahora, antes de que eso ocurra la AIREF, como autoridad fiscal independiente, ya advierte de que entraremos en recesión, algo que el Gobierno no contempla en sus cuentas.
Las instituciones no se creen los presupuestos de Pedro Sánchez
La presidenta de esta institución afirma que «esta falta de realismo no solamente afecta al escenario de ingresos sino principalmente al escenario de gastos» e indica que «entraríamos probablemente en terreno negativo, tanto en el cuarto trimestre de este año como en el primer trimestre del año próximo».
En línea con lo que indica la AIREF se encuentra la visión de FUNCAS, Fundación de las Cajas de Ahorros, que indica que «también posiblemente podamos conocer una recesión, al menos una recesión técnica, durante último trimestre de este año y el primero el que viene».
Además, el Instituto de Estudios Económicos dice sobre los presupuestos que «es un gasto público inercial, cortoplacista, en el que la eficiencia ha sido descuidada». Añade, además, que «la capacidad de crecimiento a largo plazo de este presupuesto sería nula en el 2023».
Parece ser que nadie se cree los presupuestos de Pedro Sánchez, como se puede ver en las declaraciones de las distintas Instituciones, a las que se suman las declaraciones del Presidente del Círculo de Empresarios que considera que «con un aroma electoralista, estos presupuestos no son los presupuestos que necesita nuestro país para conseguir su recuperación económica».
A esto hay que añadir la visión del propio Banco de España, que ha dicho hace apenas unos días que «las autoridades deben evitar un impulso fiscal generalizado que lo único que podría hacer es exacerbar las presiones inflacionistas e incluso deteriorar aún más las cuentas públicas».