J.M CASTRO | SABERO
No defraudó. Desde media tarde del sábado, recién llegado de Madrid, Jaime Peñafiel fue abordado por numeroso público, en su mayor parte femenino, demandándole un autógrafo, una fotografía o una pequeña charla. El escritor, periodista y tertuliano atendió a los vecinos que llenaron la plaza del Ayuntamiento para escuchar sus palabras como pregonero de las Fiestas en honor de Nuestra Señora Reina de los Ángeles.
Recibido por el alcalde, Francisco García, y los concejales de la Corporación, la primera visita ineludible fue al Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León. Ya nada más entrar quedó asombrado del edificio de la Ferrería de San Blas, sede del museo, del que tenía algún vago recuerdo, a pesar de haber transcurrido más de medio siglo desde que trabajo como ayudante de picador en el Pozo La Herrera I, de Sahelices de Sabero. En la visita, acompañado por el director, Roberto Fernández, dejó patente su conocimiento de la minería y, en especial, de la representación de la farmacia, ya que Peñafiel es nieto de farmacéutico.
En el trayecto del MSM al Ayuntamiento fue abordado en diversas ocasiones para fotografiarse al lado de los vecinos y visitantes; o para firmar un autógrafo en uno de sus libros. Así estuvo casi media hora hasta que, en compañía del alcalde y ediles recibió a las reinas y damas de los festejos y accedieron al balcón de la Casa Consistorial para pregonar las fiestas.
Su alocución fue directa, sin necesidad de apuntes, sencilla; y, sobre todo emotiva y dejó claro que él siempre había mantenido la ilusión de regresar a aquellos lugares donde había iniciado su vida laboral, promesa que había hecho a su mujer y que el pasado sábado vio cumplida.
Señaló haber hecho una parada en las instalaciones del pozo La Herrera I, «del que apenas ya no queda nada de mi época», recalcó, y que había sentido una «nostalgia y a la misma vez alegría, de esos dos duros años de trabajo como ayudante de picador». Hizo hincapié en varias anécdotas o hechos de su vida en la cuenca y no dejó pasar la ocasión de mencionar a la reina y su relación con la Casa Real.