Después de verano, el equipo de gobierno prevé realizar una conexión con el equipo de control por huella digital, obligando a los trabajadores a registrarse a la entrada de la puerta de la sede del Ayuntamiento de León.
Si te acercas a la puerta del edificio de la calle de Ordoño II ya se podrás ver los nuevos lectores biométricos que no están todavía en funcionamiento, al igual que las cámaras de vigilancia complementarias.
El control de huellas digital tiene una duración de cuatro años con validez desde que se inician los tramites, aunque actualmente se encuentra bloqueado por denuncias ante la inseguridad de protección de datos. Este recurso esta aún está pendiente de resolver en el Tribunal Superior de Justicia (TSJ), el Ayuntamiento intentará reconducir la situación con un pacto con todas las fuerzas sindicales.
Pero no solo los trabajadores dispondrán de esta nueva tecnología, sino que además contarán con un perfil al que podrán tener acceso los empleados con una contraseña particular, quedarán registrados todos los datos de su evolución laboral, vacaciones, permisos, incidencias, partes y justificantes.
Con estas medidas el Ayuntamiento pretende mejorar el control de sus empleados, a que hora entran y salen de su trabajo, cuándo se ausentan y por cuánto tiempo, sobre todo en las horas de descanso.
Los datos registrados se guardan en un directorio central y ante cualquier incidencia con la jornada laboral del empleado, el sistema abrirá una incidencia y la gestión de las alegaciones oportunas. Y como medida, si no se justifica el absentismo del empleado o la falta del horario de permanencia en su puesto de trabajo, se podrán aplicar descuentos en la nómina del trabajador.
Por el momento, esta medida sólo se llevará a cabo en el edificio central, en el antiguo consistorio de San Marcelo y en el palacio de Don Gutierre, donde se acumulan la mayoría de los servicios administrativos.
Digital de León