La noche del pasado miércoles, dos niños resultaron heridos por los disparos de la policía contra una furgoneta que se saltó un control.
El tiroteo se produjo en el control fronterizo entre Bosnia y Croacia. La policía croata disparó contra la furgoneta que se saltaba el control sin saber que transportaba a 29 inmigrantes indocumentados, entre los que se encontraban los dos niños que resultaron heridos por las balas que les alcanzaron.
La vida de los menores, cuya nacionalidad aun no se conoce, no corre peligro, pero fueron trasladados y hospitalizados en Zadar. Por su parte, al Hospital de Gospic, llevaron al resto de heridos por los movimientos del vehículo.
El conductor de la furgoneta, tras los disparos, detuvo el vehículo y huyó a los bosques. Fueron los agentes cuando inspeccionaron la furgoneta tras el tiroteo encontrando a los inmigrantes y atendieron a los heridos.