El joven de 18 años acusado de marcharse sin pagar de hasta ocho establecimientos de Gijón ha sido condenado a un año y dos meses de prisión. Además de la devolución íntegra del importe que dejó de deuda en los complejos hosteleros.
Según afirma la jueza en el auto, considera probado el delito continuado de estafa. Decisión tomada en vista a la declaración aportada por los representantes legales de los hoteles en los que se alojó. Pero, seguidamente, abandonó de manera definitiva sin hacerse cargo de los gastos que le fueron requeridos.
Además de la pena de prisión impuesta, el joven deberá abonar todo el dinero que los hosteleros le reclaman.
La defensa
Por su parte, la defensa reclamó su libre absolución alegando que en ningún momento el joven había aparentado solvencia. Salvo en uno de los hoteles, el acusado no supera la cuantía adeudada de 400 euros.
La jueza menciona, además, que no constaba que el acusado hubiese confesado los hechos con antelación al juicio. En principio, si se hubiera dado el caso, podría haber visto ligeramente reducida su condena.
Modus operandi
El joven había utilizado un modus operandi idéntico en todas las ocasiones. Gracias a él, había podido irse de los hoteles pese a adeudar una cantidad total de 2.363 euros.
Según su versión, el joven realizaba las reservas a través de un conocido portal de búsqueda de ofertas. Posteriormente aportaba una tarjeta de crédito para hacer efectiva la reserva. Pero finalmente, los hosteleros les resultaba completamente imposible cobrar cualquier importe.