La Guardia Civil ha detenido a un vecino de Mieres de 80 años después de que ayer circulara con su vehículo en sentido contrario durante nueve kilómetros por la autovía A-66, de Mieres a Pola de Lena, y colisionara contra otro turismo, al que ocasionó diversos daños materiales.
Tras prestar declaración, el supuesto kamikaze ha sido puesto en libertad tras abrirle diligencias por un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria, según ha confirmado a Efe un portavoz de la Comandancia de la Guardia Civil de Oviedo.
El hombre viajaba solo en un Volkswagen Polo, de color gris, cuando a las 7.45 horas de ayer fue detectado circulando por el carril contrario, en la plataforma de Gijón a León, entre los kilómetros 49 a 58 de la A-66 en un momento de gran intensidad de tráfico.
Tras recibir el aviso de otros conductores, una patrulla del destacamento de Tráfico de Mieres se desplazó a la A-66 y trató de darle el alto para que detuviera el vehículo, pero el conductor hizo caso omiso y llegó a circular durante tres kilómetros en paralelo al vehículo policial que iba advirtiéndole de que frenara con luces y sirenas, según han explicado testigos presenciales.
En su trayectoria, el supuesto kamikaze provocó momentos de gran tensión, al obligar a otros conductores a apartar sus vehículos, especialmente camiones que a esa hora circulaban por la A-66, y algunos de los cuales sufrieron daños materiales, como raspaduras y roturas de espejos retrovisores.
Dos agentes del destacamento de Tráfico de Mieres lograron finalmente adelantar al Volkswagen y darle el alto, a pie, varios metros más adelante, cuando ya se encontraba a la salida de Pola de Lena.
El hombre fue detenido y trasladado a dependencias policiales, donde al parecer explicó que circuló en sentido contrario «por una confusión», según han indicado fuentes de la Benemérita.
El hombre, que ha sido imputado por un delito contra la seguridad vial por conducci´n temeraria, dio negativa en el control de alcoholemia.
En la entrada por la que accedió el vecino de Mieres se reforzó hace unos meses la señalización de prohibición de acceso, con fondo amarillo reflectante y mayor tamaño de letra para hacerlo más visible, tras la solicitud de los agentes de tráfico de Mieres en sus informes.