El joven de solo 25 años ha perdido la vida en un fatal accidente tras despeñarse 60 metros en el Cares
Un joven de 25 años perdió trágicamente la vida en un accidente en la icónica Ruta del Cares, un sendero de montaña que discurre entre las provincias de Cabrales y León. La víctima se precipitó desde una altura de aproximadamente sesenta metros, en una zona de difícil acceso, en un suceso que conmueve a la comunidad y pone de relieve los riesgos inherentes a la práctica del senderismo en entornos naturales.
La Ruta del Cares, famosa por su espectacular belleza escénica y su desafiante trazado, se convirtió en escenario de luto y dolor cuando un joven excursionista, de apenas 25 años, sufrió un fatal accidente. El trágico suceso tuvo lugar en la tarde del martes 15 de agosto, cuando el fallecido, cuya identidad aún no ha sido revelada, se encontraba explorando la ruta en compañía de otro hombre de 56 años.
Según los informes, el accidente ocurrió en un tramo cercano al límite entre las provincias de Cabrales y León, a unos cuatro kilómetros de Caín, punto de partida habitual para los amantes del senderismo en la Ruta del Cares. Por razones aún desconocidas, el joven excursionista se despeñó desde una altura de aproximadamente sesenta metros, llegando a una zona de difícil acceso en las montañas.
La respuesta de emergencia fue rápida y coordinada. Personas que presenciaron el trágico suceso realizaron una llamada de alerta al 112 de Castilla y León, que transmitió la información al Centro de Coordinación de Emergencias del 112 Asturias. En la llamada se informaba que el compañero del fallecido estaba intentando descender hasta el lugar de la caída.
El Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) movilizó al Grupo de Rescate con un helicóptero medicalizado y a los bomberos de los parques de Llanes y Cangas de Onís. Dada la complejidad de la situación y las condiciones meteorológicas adversas, se requerían maniobras especializadas para llegar a la zona donde yacía el joven. Los rescatadores desplegaron sus habilidades y recursos, realizando maniobras de grúa con una aeronave de bomberos para acceder al lugar.
A pesar de los esfuerzos de rescate, la médica-rescatadora confirmó la triste noticia de que el joven excursionista no sobrevivió a la caída. El acompañante, afortunadamente ileso, fue evacuado y trasladado a Caín.
La Guardia Civil, en colaboración con el Greim de Sabero (León), llevó a cabo el procedimiento para recuperar los restos del fallecido. La difícil ubicación del accidente requería una operación de grúa con la aeronave del SEPA para completar la evacuación y el traslado del cuerpo. La comunidad local se conmovió por la pérdida de esta joven vida, y la tragedia sirve como un recordatorio doloroso de los riesgos potenciales que pueden surgir al explorar áreas naturales accidentadas y desafiantes.