Las bebidas energéticas son una auténtica bomba para el organismo, pudiendo provocar serios problemas si se abusa de su consumo
Así nos afectan las bebidas energéticas
Las bebidas energéticas se han incorporado en nuestro entorno con una facilidad pasmosa. En parte, esto se debe al éxito de su publicidad, generalmente agresiva, colorida y llamativa, que ha seducido al público para el que están dirigidas: niños y adolescentes.
Pero, si son tan dañinas, ¿por qué las autoridades sanitarias no hacen nada al respecto? Lo cierto es que en España ya estamos viendo movimientos de interés al respecto.
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), ha elaborado algunos sistemas para alertar de los peligros que tienen las bebidas energéticas hacia la salud. A nivel legal por ejemplo, hemos visto la reciente intención de limitar la publicidad dirigida a menores de este tipo de productos.
Casi muere por beber 12 bebidas energéticas en menos de 10 minutos
Para ilustrar el peligro que suponen las bebidas energéticas, te mostramos el caso de un ‘gamer’ que sufrió gravemente por tomarse 12 latas de esta bebida en menos de 10 minutos.
El protagonista de esta historia es un hombre de 36 años apodado «JS» para conservar su privacidad. El sujeto se presentó en el hospital más cercano con el estómago hecho un desastre.
Tenía punzadas en el estómago y vómitos irrefrenables a causa de la ingesta masiva de bebidas energéticas en su centro de trabajo. Según informó, la empresa donde «JS» trabajaba ofrecían estas bebidas a sus trabajadores de forma gratuita como recompensa por sus aportes a la compañía.
Al parecer, «JS» fue animado por sus compañeros a beberse todas las latas que pudiera en 10 minutos. Logró beberse 12 latas en menos de 10 minutos, aunque los problemas no tardaron en aparecer.
En su boca aparecieron llagas, su estómago se revolvía a más no poder y le ardía el pecho. El hombre, en vez de acudir de inmediato a un centro de salud, decidió continuar con su rutina y hacer caso omiso a los síntomas.
Al cabo de unas semanas, en las que el malestar persistía, acudió al hospital donde le analizaron más profundamente. Allí le diagnosticaron pancreatitis aguda, además de problemas en otros órganos como el hígado y los riñones.
Jorge Garrido