Los tres detenidos por la muerte de David Carragal ha sido acusados de un delito de homicidio. David recibió una paliza mortal durante las fiestas de La Florida, en Oviedo, tras negarse a dar tabaco a un grupo de jóvenes.
Los agresores se personaron en la comisaría, sabedores de que estaban siendo buscados, para declarar de forma voluntaria y aseguraron que no le dieron una paliza al joven. Sí reconocen que existe un «cruce de miradas, un pique y un enfrentamiento físico», pero niegan que la emprendieran a golpes con él.
«Hubo un cruce de miradas y un pique, uno de los agresores lanzó una patada al aire pero no saben si llegó a darle bien», declaró uno de ellos ante la Policía, según publica La Nueva España.
Los testigos presenciales de la paliza aseguran que David recibió una patada en la cabeza y que siguió siendo golpeado una vez ya en el suelo. Además, apuntan que David fue abordado por un grupo de unos seis jóvenes de entre 18 y 21 años.
David Carragal, que murió tras pasar varios días en estado crítico, tenía un futuro por delante de lo más prometedor: un trabajo en Londres al que pensaba incorporarse en septiembre y unas oposiciones muy pronto. «Estamos en una mala pesadilla y no nos lo llegamos a creer. No puede ser», explica Bruno Viña, uno de sus amigos.