Con una escopeta de caza ha sembrado el pánico en las puertas del cuartel
El cuartel de la Comandancia de la Guardia Civil en Toledo ha sido el escenario de un hecho tan atípico como surrealista. Esta madrugada, a las seis menos veinte de la mañana, un hombre de 58 años ha llegado hasta las instalaciones con una escopeta de caza y se ha puesto a pegar tiros.
Todo hace pensar que el hombre tenía intención de atentar contra la vida de alguno de los agentes que se encontraban en el lugar. Afortunadamente no ha habido que lamentar daños personales.
Un agente que se había acercado hasta el atacante para identificarle logró desviar los tiros tras forcejear con él. Una acción que logró que el suceso quedara en una curiosa anécdota.