Fallece un menor, de once años, al romperse un cristal en el domicilio y clavarse los cristales jugando con su hermano.
Los hechos ocurrieron en el día de ayer, domingo 23 de septiembre de 2018. Aproximadamente a las 15:00 horas de la tarde en Valencia.
Parece ser que los padres de los menores se ausentaron del domicilio unos minutos. Debido a que tenían que ir a recoger la comida que habían encargado en un establecimiento.
El suceso
Por consiguiente, los dos hermanos menores, de diez y once años, se encontraban en el domicilio familiar. Los pequeños jugaban a perseguirse. Sin embargo, uno de ellos tropezó accidentalmente. Por desgracia, se rompió la puerta de cristal con la que chocó y ésta se rompió en mil pedazos.
Según publica el portal web Levante-EMV, la madre estaba en la calle aparcando el coche. Mientras el padre iba a recoger la comida que habían encargado, para las tres de la tarde.
Por suerte, los cristales hirieron al hermano menor en el brazo, ocasionándole heridas leves. Pero, el hermano mayor se llevó la peor parte. Los cristales se le clavaron en más partes. Y, uno de ellos en el estómago, seccionando una de las venas.
Como resultado, el menor de once años tuvo una hemorragia interna. Al ver la sangre, el pequeño, se asustó y salió corriendo a la calle para avisar los progenitores.
Cuando el padre de los menores llegó al domicilio, se encontró al pequeño desvanecido y pálido. Rápidamente dio aviso a Emergencias del 112.
Cincuenta minutos de reanimación cardiopulmonar (RCP)
Al lugar acudió una patrulla de la Policía Nacional, quienes taponaron la herida para detener la hemorragia. Debido a que el niño, ya había entrado en parada cardiorespiratoria, comenzaron la reanimación cardiopulmonar.
Más tarde, a los pocos minutos, llegó Emergencias Sanitarias (SAMU), quienes tras 50 minutos de RCP lograron estabilizar al pequeño. Posteriormente le pusieron respiración artificial.
A continuación, los Bomberos sacaron la camilla con el menor a través del balcón del domicilio. Porque no podían por el ascensor, debido a los aparatos sanitarios que llevaba el personal sanitario.
Finalmente, le trasladaron al Hospital de la Fe de Valencia y le intervinieron quirúrgicamente de urgencias. Por desgracia, falleció en el hospital sin que los médicos pudieran reanimarle de nuevo.
