El Pisuerga en Valladolid ha sido el trágico escenario de varios intentos de suicidio en una semana. Una llamativa cifra que se salda con dos personas rescatadas por agentes de la Policía Nacional y un fallecido. Los puentes de la ciudad son los lugares elegidos para llevar a cabo estos intentos. El río de la ciudad se ha convertido en un oscuro punto para los suicidas.
El río de la desesperanza
Un nonagenario apareció flotando en las inmediaciones de la Escuela de Música. Un testigo lo vio meterse en el río vestido y los servicios policiales no pudieron hacer nada por salvarlo. Ocurrió el lunes 20 de marzo. Esa misma tarde un varón de 29 años se lanzó al río desde el puente Condesa Eylo. Un agente de la Policía Nacional no dudó en lanzarse a rescatarlo (con las botas puestas) cuando vio el cuerpo flotar a varios metros de la orilla. Entre la ayuda de varios compañeros lograrlo sacarlo.
Al día siguiente, a la misma hora a las siete de la tarde, un hombre se lanzó desde el puente de Santa Teresa. Este hombre intentó salir del agua pero no conseguía llegar a la orilla por sus propios medios. Agentes de Policía Nacional no dudaron en meterse al agua y auxiliarle consiguiendo sacarlo del río y cubrirlo con la manta de emergencia que portaba en el vehículo policial.