Parajís venera al propio demonio en una siniestra ermita
En León hay pueblos sorprendentes y los hay también siniestros. Una pequeña aldea de Balboa cuenta con un habitante sorprendente, el propio demonio. En una zona de difícil acceso de El Bierzo, llena de leyendas, está escondida una ermita donde se venera al propio demonio.
En la ermita de Parajís -Paraxis como se le conoce- luce una sorprendente talla del demonio. Es el ‘O Demín’. Para evitar que el demonio haga sus fechorías el Ángel de la Guarda protege a todo el que se aproxima y vigila al diablo.
Es tal la fe de esta zona, que para que no se enfade hay convocatorias para venerarlo y así tenerlo contento. La iglesia no está abierta al culto y muchas veces los turistas se quedan con las ganas de observar al propio demonio. Mejor no encontrar el lugar, por si acaso…