El caso de Esther López cada día está mas cerca de resolverse. Desde que desapareciera el pasado 12 de enero en la localidad Vallisoletana de Traspinedo, a día de hoy no sabemos exactamente lo que sucedió por el secreto de sumario. La Guardia Civil va avanzando en el caso poco a poco pero con paso firme. Miguel, el padre de Esther López afirma que su hija nunca hubiera vuelto andando aquella noche.
Miguel reconoce que las últimas semanas se han dado varias versiones y datos falsos sobre la muerte y desaparición de su hija, pero acepta el secreto de sumario que le mantiene sin saber más datos sobre el caso de su hija más allá de los que ya se ha dado a conocer. La familia ni siquiera sabe aún como murió exactamente, pero lo que critican es que si alguien pudo salvarla, y no lo hizo, sería terrible que la dejaran así.
El caso de Esther López avanza
En cuanto a los avances del caso de Esther López, la Guardia Civil va apuntando varias teorías y están descartando posibles sospechosos que tenían en mente. Una de las conclusiones a las que están llegando, es que «El Manitas», el que fuera el primer y único detenido por el caso, al parecer no estaría relacionado con la desaparición y la muerte de Esther, por lo que podrían estar barajando a otras personas como las causantes de su muerte. Tras esta noticia, la jueza levantó la prohibición de que no pueda salir de Valladolid, pero le mantienen la prohibición de salir de España. «El Manitas» está obligado a informar de cualquier cambio de domicilio y tiene que comparecer en el juzgado siempre que se lo requieran.
Una de las cosas que tiene claras el padre de Esther, es que el cuerpo de su hija no estuvo donde se encontró durante tantos días. Él asegura que la conocía como nadie y que no se cree que fuera posible que su hija volviera andando a casa con ese frío en lugar de llamarle a él para que fuera a recogerla, ya que Esther era muy friolera.
Los padres lo que agradecen es que, al menos, se haya podido encontrar el cuerpo de su hija para que así, tanto Esther como ellos, puedan descansar en paz en ese sentido.
Inés Alonso