La historia de la provincia de León está muy marcada por la influencia de los romanos
Cuando pensamos en el origen histórico de nuestra ciudad hay que hacer referencia al imperio romano ya que construyeron un asentamiento, llamado la Legio VII, que dejó su huella en la ciudad. La Legio VII Gemina fue una legión romana que se estableció en la primera mitad del siglo I y en torno a el cual el asentamiento empezó a crecer y a forjarse la ciudad de León. La Legio VII no fue la primera en asentarse en el lugar sino que antes ya estaba la Legio VI Victrix. Esta legión fue la única que se quedó en Hispania a principios del siglo I, debido a que las Guerras Cántabras habían terminado y el resto de legiones dejarán la península.
La villa romana de Navatejera recoge restos arqueológicos de una villa romana del siglo I al V d.C., con mosaicos bien conservados, además de restos de estancias termales y explotación agropecuaria. Su origen está relacionado con el campamento militar de la Legio VII Gemina. Los primeros restos se descubrieron en 1885 cuando unas lluvias descubrieron un trozo de unos pavimentos que se identificaron como romanos. Ese mismo año empezaron las excavaciones. En 1889 se aprueba la construcción de un vallado y de estructuras para proteger los mosaicos. Para ello se destinan 8746 pesetas y 56 céntimos a cargo del Ministerio de Fomento. En el 1931 la villa romana de Navatejera fue declarada Monumento Histórico Artístico. En el año 1976 un grupo de arqueólogos dan noticia de una nueva excavación preventiva. También en 1984 se promueva un plan de rehabilitación de la villa que comprende obras de limpieza, excavación y restauración que se realizan dos años después. Desde 1992 la Villa se agregó al Museo de León como parte del edificio de Pallarés en el que se expones una maqueta del edificio.
Del campamento de la Legio VII todavía se conserva la Porta Prinsipalis Sinistra, que era una construcción monumental que permitía el paso al campamento de la Legio VII gemina desde el este. Se trata de una puerta doble, flanqueada por dos torres rectangulares gemelas, de 12,8 m de longitud por 5 m de anchura al exterior. El paso se realizaba desde dos pasajes cubiertos con bóvedas, a los que se accede mediante una puerta exterior de madera de doble hoja. De las cuatro puertas del campamento se tiene constancia de la Porta Principalis Siniestra está situada en el costado oriental. Estaba flanqueada por varias torres rectangulares cuyos restos se conservan en la Cripta arqueológica de la Puerta Obispo, construida a tal efecto junto a la Catedral. Una puerta similar a la Porta Principalis Dextra, debió estar en el extremo contrario del campamento, donde hoy se sitúa el Palacio de los Guzmanes y coincidiendo con la puerta de la Diputación de León. Ambas se unía por medio de la actual Calle Ancha.
Las Murallas de León delimitan lo que en la actualidad se denomina como Casco Antiguo. Es de origen romano y tiene trazas medievales, la muralla está considerada como una de las más antiguas que se conservan en España. Desde 1931 forma parte de la lista de Monumento Histórico Artístico de España. En un comienzo el amurallado consistía en una estructura provisional de madera que servía como defensa del campamento romano de Legio VII durante la época Augusta allá por el siglo I a.C. Cuando finalmente se estableció la ciudad de León, las murallas se reforzaron y cambiaron la madera por sólida piedra. La muralla romana que se puede ver en la actualidad se levantó entre el siglo III y IV. Esta se hizo con un material más resistente, con 5 metros de ancho y 10 metros de alto utilizando la piedra labrada, canto rodado, reforzada con moteros de cal. La muralla medieval se extiende hacia el sur es un añadido que ordenó construir el rey Alfonso VI a finales del siglo XIV. Se caracteriza por sus dobles muro de canto rodado y sus almenas rematadsa con saeteras muy típicas de la época medieval. Uno de los tramos que mejor se conservan se localiza en la Avenida de los Cubos. Es el tramo más largo de la muralla se extiende desde la parte norte de la Catedral hasta la Plaza del Espolón, lugar en el que se encuentra el Arco de la Cárcel, o la Puerta Castillo, una de las 4 puertas que aún se mantienen en buen estado.
El puente romano de Ledesma es un puente que es probable que ya existiera en la época romana, el puente se construyó en el siglo XV sobre el río Tormes con unas características parecidas a las que se pueden apreciar en la actualidad. De esta época se conservan los dos arcos ojivales centrales. Los ojos de los extremos podrían derivar de la reforma que se llevó a cabo a mediados del sigo XVI. El arco que resta, volado por los franceses en la Guerra de la Independencia, fue reedificado en 1816 a expensas del conde de Ledesma con el fin de seguir cobrando el derecho de pontazgo, del que disfrutó hasta 1909, fecha en la que el puente pasó a ser de titularidad pública. A la entrada de la puerta se encuentra la ermita de Nuestra Señora del Carmen, patrona de la villa Ledesma se ubica a 35 km de Salamanca. Para llegar a esta villa histórica debemos tomar la carretera SA-305 desde la capital charra.
En Astorga nos encontramos con una red de saneamiento que perteneció a la antigua Roma y está en un buen estado de conservación de hecho algunos de sus ramales siguen en uso. Los restos de las cloacas se descubrieron en los años sesenta en el siglo XIX cuando seguían con exploraciones sistemáticas que dan lugar al descubrimiento de este conducto. El trazado sigue a las calles lo que le permite obtener una idea aproximada del urbanismo de Asturica Augusta, con calles anchas de 4 a 7 m de anchura. Viviendas privadas, tabernae, o establecimientos comerciales y artesanos en especial las termas, que vertían sus aguas a esta ciudad subterránea. Inicialmente se construyeron conductos adintelados, con capacidad limitada, pero debido al crecimiento de la ciudad en la segunda mitad del siglo I, fue necesario desarrollar una segunda red para mayor caudal. Alrededor del año 80 d.C. se levantaron galerías abovedadas, con alturas de hasta 1,80 metros y anchura próxima al metro, para facilitar su mantenimiento, a veces con andenes laterales para el paso. En 1866 volvieron a ponerse en uso como nuevo alcantarillado de la cuidad.
El Castro de La Ventosa se encuentra ubicado en el margen izquierdo del río Cúa, cerca de la localidad de Valtuille de Abajo, perteneciente al término municipal de Villafranca del Bierzo, en la comarca del Bierzo de la provincia de León. Bergdunum es el nombre original por el que los fundadores astures conocían a esta ciudad-fortaleza. Los restos encontrados han verificado la ocupación prerromana de Castro Ventosa. Sería conquistada por los romanos en el año 25-23 a.C. según los datos que tenemos. El vestigio del yacimiento de Castro Ventosa es la magnífica muralla de época Bajo Imperial Romana comparable a las de León, Lugo, Astorga o Braga. Las puertas de acceso están ubicadas en los extremos del camino central que atraviesa la meseta castreña de este a oeste, la Puerta de Sol y la Puerta del Viento, flanqueados por bastiones. La muralla con 1,136 metros de longitud, altura de 8 metros y grosor de muro de 4 metros reforzada por torreones semicirculares.
Las Médulas son la mayor mina a cielo abierto de la época romana y declarada Patrimonio de la Humanidad, va más allá de este paisaje es una de las mayores obras de ingeniería de la Antigüedad. En la explotación aurífera de Las Médulas las partículas de oro aparecen en estado libre. Por eso es necesario deshacer la montaña, lavar el conglomerado para recoger el oro y evacuar los estériles resultantes fuera de la mina. Todo esto requería mucha agua que iba desde las montañas más altas hasta la explotación. Una vez llegaba allí se almacenaba en depósitos hasta su utilización. Hay más de 400 km de canales, algunos de los cuales superan los 100 km de longitud. En la actualidad, algunas de estas infraestructuras han sido puestas en valor para que quienes quieran puedan pasear por ellos y poder apreciar esta obra de ingeniería romana.