La subdelegada del Gobierno en León, María Teresa Mata, aseguró hoy que volverá a su casa, es decir, a su puesto como catedrática en la Universidad de León, y lo hará «muy contenta» tras tres años en la subdelegación, aunque «con tristeza», ya que le habría gustado que la salida del cargo hubiera sido «menos abrupta».
Visiblemente emocionada, Teresa Mata afirmó que haber sido subdelegada del Gobierno “ha sido un absoluto regalo” y aseguró que en el ejercicio de sus funciones cumplió todo lo que prometió, “que era el servicio a la provincia de León y a los leoneses”, para desear “suerte y acierto” a quien se convierta en su sucesor, con el que aseguró esperar “un traspaso absolutamente normalizado”.
A la espera de conocer los plazos en los que se desarrollarán los acontecimientos, Mata explicó que cuando llegue el momento de efectuar el traspaso de poderes le trasladará su “opinión sincera” al nuevo subdelegado o subdelegada sobre lo que la provincia necesita, porque “es importante que la subdelegación del Gobierno siga siendo un órgano presente en la vida de provincia, de los pueblos y de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado”.
No obstante, la subdelegada no quiso hacer ninguna valoración de la situación política que atraviesa en estos momentos el Gobierno de España porque “como todo el mundo sabe soy la subdelegada del Gobierno de España en León nombrada por el Partido Popular y me siento muy orgullosa de ello”.