A lo largo de los últimos meses Bitcoin se ha estado moviendo en un rango que fluctúa entre los 18.000 y los 20.000 dólares. Sin embargo, a lo largo de las últimas semanas parece haber perdido, quizá definitivamente, el soporte de los 20.000 dólares.
No obstante, esta caída podría no quedar ahí y algunos analistas auguran un próximo descenso en torno a un 12%, lo que situaría el precio de Bitcoin por debajo de los 18.000 dólares, incrementando, una vez más, las pérdidas de los inversores.
Por el contrario, otros expertos se muestran más optimistas al respecto, e informan de la existencia de algunas señales de recuperación en el mercado bajista actual, así como en la capitalización del mercado cripto, que actualmente se encuentra por debajo del billón de dólares.
El inicio de la debacle en 2021
La caída en picado de Bitcoin iniciada a finales del 2021 se ha llevado por delante la cotización de las altcoins -muchas han desaparecido- en una espiral descendente que también ha arrastrado a numerosas exchanges de criptomonedas, provocando la ruina de un gran número de inversores que habían apostado por esta nueva visión del dinero, quizá sin tener conocimientos fundamentales del riesgo y funcionamiento de este mercado.
Si bien la criptomonedas eran grandes desconocidas para la mayoría, el confinamiento obligatorio provocado por la pandemia de Covid fue el detonante de un aumento exponencial de la popularidad de estos activos digitales que muchos veían como una forma rápida y fácil de obtener beneficios, debido en parte a que el rápido aumento de precio de Bitcoin, unido a las declaraciones de figuras multimillonarias que proclamaban su inversión en el criptoactivo, animaban a una compra que, en numerosas ocasiones, se realizaba sin tomar demasiadas precauciones.
Además, a lo largo del 2021, las noticias se hacían eco de que las criptomonedas empezaban a ser tenidas muy en cuenta por los inversores profesionales, empresas y grandes entidades financieras, animando aún más a cualquier inversionista a subir a un carro cuyo rally alcista parecía no tener fin.
Se popularizan los fondos de inversión
De hecho, la popularidad continuó en aumento y, si bien estaba destinado al inversor profesional, en septiembre del 2021 la Autoridad de Supervisión del Mercado Financiero de Suiza dio luz verde a la creación del primer fondo de inversión en criptoactivos en ese país, al que se denominó Crypto Market Index Fund y que daría la oportunidad de diversificar la cartera de los inversores, participando en estos activos de manera regulada y segura.
Poco después hacía su debut el primer fondo cotizado de futuros de Bitcoin en Wall Street de la mano de Proshares.
En esos momentos, las criptomonedas ya ocupaban su lugar en el mercado de los inversores profesionales, sin embargo, China, por su parte, sorprendía con el anuncio de que declararía ilegal todo tipo de actividad con las criptomonedas.
Un año muy complicado
El 2022 ha sido un año nefasto para las cripto. Desde el mes de enero Bitcoin ha perdido cerca del 60% de su valor.
Este panorama que, según los expertos, podría ir a peor, pone en entredicho el futuro de las criptomonedas que muchos auguraban como sustituto del dinero tradicional.
El desplome de LUNA en apenas unos días, en los que perdió casi el 100% de su valor, dio inicio a una oleada de pánico en el mercado, en un efecto dominó que se llevó por delante al resto de los criptoactivos, incluidos Bitcoin y Ethereum.
Planes para la regulación
Como consecuencia del aumento exponencial de la inversión en estos activos y debido al riesgo que conlleva, el Gobierno de España anunciaba a principios de año que llevará a cabo una concreción especificando el modo en que deberán de tributar aunque, por el momento, está previsto que se retrase su implementación hasta el 2023.
Este plan se integraría dentro de una estrategia a nivel global para lograr la regulación de las criptomonedas y, a finales del 2021, ya comenzaba a requerir a los contribuyentes que declarasen sus saldos criptográficos desde el 2017.
Recientemente, tras la aprobación de la propuesta por parte del Consejo Europeo, los miembros de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo han dado luz verde, por mayoría aplastante, al marco de los mercados de criptoactivos -MiCA-, cuyo objetivo es la creación de un marco normativo coherente entre los estados miembros de la Unión Europea para las criptomonedas y que podría entrar en vigor en el próximo 2024.
