La tesis doctoral de Pedro Sánchez estaría nuevamente bajo sospecha. A pesar del comunicado emitido por La Moncloa el pasado septiembre en el que se aseguraba que el trabajo académico de Sanchez no podía ser considerada un plagio porque había superado los softwares de coincidencia, el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno asegura ahora que «no ha habido actuación pública en el proceso de verificación de la autenticidad de la tesis».
Todo parece indicar que ningún organismo público verificó la originalidad de la tesis de Sánchez. La Moncloa, en una comunicación oficial, subrayó que para evaluar el trabajo del presidente del Gobierno se emplearon «dos de los programas más rigurosos en el ámbito académico (Turnitin, que se emplea en la Universidad de Oxford, y PlagScan, referencia en Europa).
Pero al Consejo de Transparencia y Buen Gobierno no le consta que el Gobierno actuara en algún sentido parecido. «Ni la secretaría de Estado de Comunicación ni ningún otro órgano de la Presidencia del Gobierno han realizado el análisis, ni emitido informes o documentos en relación con el uso de las herramientas Turnitin y PlagScan”.
Hasta este momento, Sánchez no ha dado a conocer este informe antiplagio, sólo difundió a través de La Moncloa sus conclusiones. Según el Consejo de Transparencia, «el software utilizado no se ha costeado con dinero público y las comprobaciones de la autenticidad de su tesis no habían sido realizadas (…) por órgano alguno de la Presidencia del Gobierno».
En consecuencia, Sánchez se valió de un informe no oficial, cuya existencia ni quiera está demostrada y cuyo pago es una incógnita. La respuesta del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno no hace más que comprometer al presidente del Gobierno.
Según informó la Moncloa, el trabajo contiene el «porcentaje normal» de plagio.