El Gobierno central podrá disfrutar de 7.700 millones extra designados por Bruselas para las reformas y las inversiones asociadas al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Los fondos en concepto de ayuda a fondo perdido se repartirán desde este viernes, fecha en la que será formalizado el acuerdo por la totalidad del Consejo Europeo.
La propuesta de la Comisión contiene modificaciones muy relevantes sobre el conjunto de fondos destinados a España. El gobierno español es uno de los países beneficiados con la colocación de una parte de los recursos del plan Next Generation EU en medidas de gasto no acogidas a la competencia, que tramitan menos burocracia. De acuerdo con estos nuevos números que se han hecho públicos este jueves, el importe total asignado a España será de 77.234 millones de euros, lo que supone un incremento de los 69.528 millones inicialmente autorizados y que se habían previsto para el país hasta ahora. La cuantía final depende del resultado de las negociaciones políticas sobre el plan Next Generation EU y también respecto a la reordenación del presupuesto plurianual actual y próximos que están previstos para concluir antes del verano.
Nueva distribución desde Bruselas
Con la nueva distribución de los fondos de recuperación, España dispondrá finalmente de 77.234 millones de recursos a fondo perdido, más de siete mil millones más que los anunciados por Bruselas a finales del pasado mes de julio, de los casi 338.000 millones que distribuirá la Unión europea para la reactivación de la economía de la UE. La Comisión ha concluido que países como Alemania, Francia y España tendrán una capacidad económica más débil en 2021 y 2022 que lo que se había estimado inicialmente, lo que aumenta el volumen de sus contribuciones al fondo de recuperación y se traduce en un reparto más equitativo entre los Estados miembros.
El incremento se debe a que el Mecanismo europeo de Recuperación y Transformación recogía una revisión de las cuantías designadas a cada país en base al desempeño que cada economía mostrara durante el año 2021 o más concretamente en función de la diferencia entre la caída de la economía en 2020 y la recuperación agregada de la misma entre 2020 y 2021. En el caso de España, el crecimiento del 6,5% inicialmente previsto se quedó finalmente en un 5,1%, lo que auguraba una revisión al alza de la cuantía a recibir por España tanto en las transferencias a fondo perdido como en los préstamos que el Gobierno pretende desbloquear para financiar de forma barata la segunda fase del Plan de Recuperación.
Los países con economías más fuertes y menos vulnerables, como Austria o Portugal, verán rebajada su participación al fondo.