A continuación podrán leer las tristes pero reales palabras que una lectora de Digital de León nos hace, reivindicando y recordando que los grandes olvidados de León también tiene voz.
En esta época de pandemia, mucho se está hablando de los beneficios que supone vivir en los pueblos, de las subvenciones y ayudas ofertadas para el medio rural. También las políticas de repoblación para evitar la despoblación, de mejoras sanitarias, carreteras y comunicaciones…
Un largo etcétera que nos están vendiendo las administraciones públicas para volver al medio rural. Pero la realidad es otra muy diferente. Solo hay que mirar las estadísticas para darse cuenta de que muchos pueblos de la provincia de León se están muriendo poco a poco y con los años, acabaran la gran mayoría por desaparecer.
Pongo como ejemplo a mi pueblo, Villalmán, pedanía perteneciente al ayuntamiento de Sahagún. Solo hay que ir para darse cuenta de las carencias que parece esta localidad, como pasear por sus calles sin asfaltar (que con las lluvias se forman grandes charcos y barrizales) algunas no disponen de alumbrado público, la carretera principal de acceso al pueblo es tan estrecha que apenas cabe un coche y su pavimento está en tan mal estado que presenta gravilla, socavones, baches.
La cobertura de Internet y datos móviles es casi inexistente igual que la señal de televisión, no hay parques, jardines o zonas infantiles, algunos bancos de madera se encuentran en un estado lamentable y astillados.
Las alcantarillas sin tapas constituyendo un gran peligro y que los vecinos han tenido que señalizar poniendo encima un contenedor de basura, tapando otras con baldosas o chapas, por no decir que faltan contenedores de reciclaje de papel/cartón y vidrio y de otras tantas mejoras que se han solicitado a citado ayuntamiento haciendo caso omiso a las innumerables peticiones de sus habitantes, tanto residentes como ocasionales.
Y por no hablar de la iglesia y del cementerio, que gracias a la ayuda y cooperación de los vecinos se pudo realizar obras de urgencia para su reparación sin contar con ninguna ayuda de la Diócesis de León.
A todos esos políticos que se le llenan la boca con las ventajas de vivir en los pueblos, yo les pregunto ¿Quién va a querer emprender o montar un negocio en un pueblo donde apenas hay cobertura ni conexión a internet?. ¿ Qué familia con o sin hijos va a querer mudarse a un pueblo donde las calles son de tierra, sin zonas infantiles, con bancos astillados y que el ayuntamiento no atiende ninguna petición cuando se les solicitan ciertas reparaciones?
¿Trata así el Ayto. de Sahagún a todos los barrios? Se gastan miles de euros en subvenciones y partidas presupuestarias bajo el pretexto de las Edades del Hombre y el Camino de Santiago.
Apartando, ninguneando e ignorando las necesidades vecinales. Parece buscar ese ayuntamiento que los vecinos se muden a la cabecera de comarca o que languidezcan y terminen por desaparecer con el fin de sus moradores, buscando la complicidad por ignorancia de los descendientes de estos lugares.
Esta es la triste imagen que ofrece Villalmán y seguramente la de muchos otros pueblos de la provincia de León cuyos ayuntamientos hacen oídos sordos a las solicitudes de los ciudadanos que muy honradamente pagan sus impuestos, ahora mas que nunca es necesario hacerse oír para que ningún pueblo, por pequeño que sea, termine en el olvido o desapareciendo, y recordar a todos esos políticos y otros organismos, que LOS PUEBLOS PEQUEÑOS TAMBIÉN TIENEN VOZ.
Por: María del Rocío Meléndez Saldaña
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