Trump destituye a la fiscal general, después de que ésta pidiese al Departamento de Justicia no acatar el veto migratorio.
El despido se produjo horas después de que Yates ordenó a los abogados del Departamento de Justicia no defender la orden ejecutiva, diciendo que no estaba convencida de que fuera legal o consistente con la «obligación de la agencia de buscar siempre justicia y defender lo que es correcto». En un comunicado, Trump dijo que Yates había «traicionado al Departamento de Justicia al negarse a hacer cumplir un orden legal diseñado para proteger a los ciudadanos de Estados Unidos». Él nombró a la fiscal federal de larga data Dana Boente como reemplazo de Yates.
El expresidente de EEUU Barack Obama manifiesta su apoyo en las protestas, asegurando que estos actos ponen en peligro los valores americanos.
Diplomáticos de EEUU critican el veto de Trump, advirtiendo que será contraproducente por el terrorismo islamista.
Artistas intelectuales americanos e importantes empresas como Facebook emprenden un movimiento contar Trump.
Además se está estudiando en qué situación quedarán los ciudadanos con doble nacionalidad.
Más de un millón de británicos se manifiestas con el fin de cancelar la visita de Trump en su país.
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