La aparición de otro semáforo con un León Rampante encandila a los leoneses
Hace justamente tres meses del momento en el que, desde el Ayuntamiento de León, se decidió implementar figuras que representaran al leonesismo en los semáforos, cambiando así las típicas siluetas de un hombre caminando donde tan solo cambiaban de color y no tenían un significado más allá de ordenar el tráfico, que ya es bastante.
En la actualidad, no solo León se ha sumado a esta iniciativa de cambiar la figura del hombre en los semáforos por un símbolo que represente a la ciudad, como es el caso del León Rampante que apareció, de la noche a la mañana, el pasado 20 de julio en la calle Arco de Ánimas. Un símbolo que ha acompañado al que fue Reino de León desde sus inicios y que con el leonesismo en auge no se quiere perder.
En esta ocasión, el nuevo semáforo con un León Rampante ha aparecido en la misma calle que el anterior, en Arco de Ánimas. La función de este nuevo semáforo es la de ordenar el tráfico de los vehículos que transiten por dicha calle, siendo los de la Policía Local y los de las viviendas adyacentes quiénes tienen acceso a esta exclusiva calle que hace no tanto tiempo estaba abierta al tráfico. No hay que olvidar que el primer semáforo que sustituyó la silueta de un hombre por el León Rampante tenía como única función dar o no el paso a los peatones.
