Un seísmo de magnitud 7,1 en la escala abierta de Richter ha sacudido el centro y sur de México, incluida la capital mexicana, lo que ha provocado destrozos en numerosos edificios, más de 44 se han derrumbado, según el presidente Peña Nieto, cortes en el servicio eléctrico y en el servicio de telefonía.
El seísmo registrado a las 13.14 (hora local) y con una magnitud de 7,1, según el Servicio Sismológico Nacional (SSM), se identificó que el epicentro se situaba a 12 kilómetros de la localidad de Axochiapan, situada en el estado de Morelos, aparentemente el más afectado.
De acuerdo con cifras preliminares de las autoridades estatales, 55 muertes se registraron en el estado de Morelos, 49 en la capital, 32 en Puebla y 10 en Estado de México. Otras tres personas han muerto en el Estado de Guerrero. La cifra de víctimas llegó a ser elevada a 248 fallecidos.
Miles de personas y animales siguen desaparecidos en los escombros. Los voluntarios y ciudadanos ayudan a las fuerzas de rescate y la Cruz Roja a repartir alimentos y ayuda, muchos de ellos con con motocicletas.
Además de edificios derruidos, se han visto afectadas calles principales y transportes públicos, provocando que los ciudadanos no puedan movilizarse por las ciudades o trasladarse a otra ciudad del país, más que a pie. Por lo que la ayuda cada vez es más necesaria y difícil de llevar a los afectados.