La céntrica plaza de Santo Domingo en León tenía un aspecto muy diferente al de hoy en día y se llenaba los días de fiesta
Hace 50 años, la Plaza de Santo Domingo de León, tenía un aspecto bastante diferente al de hoy en día. En aquel entonces, la plaza era un espacio abierto y amplio, con un pequeño parque con jardines en el centro, al que los leoneses iban a pasar las tardes y al mercado los días de fiesta.
En la plaza, había varios bancos de piedra y madera donde la gente podía sentarse a descansar y charlar con amigos y vecinos. También había una pequeña fuente en el centro del parque, que solía ser un lugar popular para que los niños jugaran y se refrescaran en los días calurosos.
En la plaza también había una serie de edificios históricos que rodeaban la zona, entre ellos la iglesia de San Marcelo, que se encontraba en una esquina de la plaza. Esta iglesia, fundada en el año 850, es uno de los edificios más antiguos de la ciudad y aún hoy en día atrae a León visitantes enamoradas del arte y de la historia.
En cuanto a la actividad que tenía lugar en la plaza, solía ser un lugar tranquilo durante la semana, pero los domingos y los días de fiesta la plaza cobraba vida con los puestos de los vendedores ambulantes y los músicos callejeros. En esas ocasiones, la gente se reunía en la plaza para pasear, tomar el sol y disfrutar del ambiente.
En general, la Plaza de Santo Domingo hace 50 años era un lugar tranquilo y acogedor, con un ambiente tradicional y una mezcla de arquitectura histórica y zonas verdes. Si bien ha habido algunos cambios en la plaza desde entonces, todavía es un lugar popular para los locales y los turistas que visitan la ciudad de León.