Está muy bien que el Ayuntamiento de León dinamice la antigua estación de Renfe de León con actividades culturales. Nueva vida para años de historia que ahora luce bien modernos. La última propuesta es música de cámara en varios conciertos gratuitos, todo muy bonito pero hay un «pero». ¡Pongan sillas por favor! Y es que es demasiado música para pocas sillas.
Teniendo en cuenta que esta actividad, va principalmente dirigida a público de cierta edad, no estaría de más poner alguna silla más. Porque sillas haberlas las hay (no vamos a recordar los grandes fastos de la capital).
Conseguir sillas es una misión imposible
Y claro, cuando hay pocas sillas, pasa lo que pasa. Se juega casi al juego de «te quito la silla». Así ocurre que cuando los conciertos comienzan a las ocho de la tarde, las tres escasas filas de sillas estén todas ocupadas a las siete y media. Lo que provoca que muchos no se queden a disfrutar de la música y generara no pocas manifestaciones de disgusto entre los presentes. Algunos de los cuales presentaron su queja ante los trabajadores municipales que allí se encontraban.
Esto paso en la inauguración de este ciclo de conciertos que se prolongarán hasta mañana y que tienen como escenario la antigua estación de Renfe de León. Esperemos que en la actuación de hoy. Será a las 20:00 horas cuando el Trio Instrumental León tome el testigo de este ciclo. Mañana sábado, 20 de agosto, será el colofón a esta iniciativa municipal con la actuación de Aslan Ensemble.
Música habrá, esperemos que sillas también.
