Compañeros del menor grabaron y difundieron un vídeo en los baños escolares
El Instituto de Ciberseguridad (Incibe) con sede en León ha recibido poro vía telefónica, en el servicio de Tu Ayuda en Ciberseguridad , la consulta de una madre. La mujer estaba muy afectada emocionalmente porque acababa de conocer una dramática situación que afectaba a su hijo adolescente, el cual aún no sabía lo ocurrido. Había un vídeo del menor en los baños de su centro escolar y estaba corriendo como la pólvora por las redes sociales.
Resulta que algunos compañeros de la escuela de su hijo habían grabado un video de él en los baños de la escuela sin su consentimiento. Este video se propagó rápidamente a través de las redes sociales y las plataformas de mensajería, lo que generó preocupación entre los educadores. El colegio tomó medidas disciplinarias ejemplares, suspendiendo a los estudiantes involucrados durante 15 días y planeando informar a los padres de todos los implicados para concienciar sobre la importancia del respeto a la privacidad de sus compañeros. Además informaron a la madre de lo ocurrido.
El dolor de una madre al contemplar el vídeo de su hijo en los baños
La mujer acudió al centro y vio el vídeo pero debido al impacto emocional no consigue recordar el contenido del mismo. Por ello y ante la situación ha decidido contactar con Incibe. A pesar de las acciones tomadas por el centro escolar.
Incibe proporcionó apoyo psicosocial para ayudar a la madre a lidiar con su ansiedad. Además, informó a la madre sobre la responsabilidad del centro educativo en situaciones de ciberacoso entre alumnos y la importancia de emitir advertencias sin revelar datos personales.
Incibe también aconsejó a la madre que buscaran una solución a través del diálogo, instándola a hablar con el centro escolar para actuar como mediadores entre su hijo y los agresores. En caso contrario, el centro podría no cumplir con sus obligaciones en casos de ciberacoso. Se enfatizó la importancia de detener la difusión del video entre los estudiantes y se aconsejó a la madre que solicitaran al centro educativo que colaborara en la eliminación del video.
Además, se recomendó a la madre que solicitara una copia del video como evidencia y se le informó sobre los pasos a seguir en caso de ser necesario presentar una denuncia ante las autoridades.
En relación con la difusión en redes sociales y otras plataformas, se alentó a la madre a denunciar y reportar en los canales apropiados, además de ejercer sus derechos al olvido y a la supresión en línea.
Finalmente, se le recordó a la madre que, si el video contenía imágenes que pudieran considerarse pornografía infantil, podría informarlo a través de los formularios de reporte pertinentes. La ayuda y orientación brindada por Incibe fueron fundamentales para abordar esta situación delicada y proteger los derechos y la privacidad del hijo de la madre.
