El McLaren MCL33 es el primer monoplaza de la historia en combinar la tecnología de la escudería británica y la de Renault como suministrador de propulsores después del fiasco de Honda (2015-2017), fue capturado en el Aeropuerto de Navarra el día antes de su presentación.
En una foto tomada desde lejos como se aprecia en el pixelado, los operarios introducían el vehículo en el camión que lo trasladaría por carretera hasta el circuito de Montmeló, donde el lunes comenzará a rodar oficialmente la pretemporada del Mundial de 2018 con Fernando Alonso como uno de los principales protagonistas. Al meterlo en la caja del tráiler, una (in)oportuna ráfaga de aire levantó la sábana negra que lo alejaba de cualquier mirada y dejó al descubierto su superficie.
McLaren ha decidido volver a sus orígenes y recuperar el naranja y el azul, unos colores con los que ya atrajo todas las miradas de la Fórmula 1 hace 50 años, en aquello que puede ser una fiel metáfora del trascendental momento que atraviesa la compañía, obligada como está a reinventarse. Este mismo viernes, el MCL33 ya estará dando vueltas ya en el circuito de Navarra en un día destinado a fines publicitarios que debería servir para dejarlo todo listo con vistas al lunes.