753 médicos funcionarios interinos que trabajan en la Atención Primaria de la Comunidad, van a ver modificada su situación laboral por un cambio en su régimen jurídico, debido a la pretensión de la Conserjería de Sanidad de promulgar un Decreto para la estatutarización de sus sanitarios abandonando la consideración de funcionario.
Son médicos que llevan trabajando, para la sanidad de la Comunidad, más de 20 años incluso antes de que se creara el Sacyl actual, como médicos de cabecera en los pueblos de Castilla y León, cuando no existían centros de salud y permanecían las 24 horas en los mismos.
La Conserjería de Sanidad pretende, con este Decreto, modificar el régimen laboral de sus médicos, ofertando la posibilidad del cambio, para los médicos funcionarios fijos, con carácter voluntario y obligatorio para los médicos funcionarios interinos. De tal manera que, para los fijos que no opten por modificar su régimen, seguirán con el que tienen actualmente hasta que se jubilen. Sin embargo, para los interinos, al ser obligatorio, el cambio de régimen es automático, pasando a ser médicos estatutarios interinos hasta el siguiente concurso de traslados.
La consecuencia para estos últimos es que no sólo se modifica su régimen jurídico sino que, en muchos casos, volverán a trabajar sin ningún tipo de estabilidad ni continuidad, como médicos sustitutos o con otros contratos, por supuesto, en condiciones más precarias.
La Conserjería de Sanidad en 24 años, desde 1982 hasta 2006 no ha convocado oposiciones a plazas de Atención Primaria. El número de plazas en la oposición del 2006 fue 70, claramente insuficientes para evitar que se acumulara el número de médicos interinos que hay en la actualidad, aproximadamente el 40 % de su plantilla de Atención Primaria.
El Consejero de Sanidad no reconoce la experiencia adquirida por el trabajo realizado en los consultorios locales por estos médicos desde los años 80. Tampoco les ha dado la oportunidad de aprobar una oposición y conseguir la condición de funcionario fijo, al no convocar oposiciones. Su propuesta, para nuestro colectivo, es cambiar las condiciones laborales alejándonos de la estabilidad y permanencia en nuestras plazas que, por otra parte, creemos que en justicia merecemos.
La Junta de Castilla y León pretende cambiar el modelo asistencial en el medio rural, reestructurando la asistencia sanitaria mediante la concentración de los profesionales en los centros de salud, con la consiguiente reducción de plazas y efectivos. Para este planteamiento le resulta más fácil que los médicos sean estatutarios y no funcionarios con competencias en sanidad municipal y otros ámbitos. Los médicos estatutarios sólo tienen competencias asistenciales.
Los representantes provinciales de todas las provincias de Castilla y León de los médicos funcionarios interinos, reunidos en Tordesillas la pasada semana, acordaron por unanimidad darse de baja en los sindicatos que han manifestado su conformidad al decreto, “olvidándose” de que existe un colectivo claramente dañado por él y afiliarse a SIMECAL-USAE, única organización sindical que está dispuesta a defender nuestras reivindicaciones.
Simecal-Usae, en las próximas fechas, solicitará una reunión con el Conserjero de Presidencia de Castilla y León, de quien dependemos orgánicamente los médicos funcionarios, para exponerle nuestra situación e informarle de nuestra reivindicación. También se le informará de la disposición a convocar una huelga en el caso de no ser atendida nuestra propuesta.
Simecal-Usae y los médicos funcionarios interinos recurriremos el Decreto de Estatutarización.
La principal reivindicación del colectivo es que los médicos funcionarios interinos puedan optar, igual que los funcionarios fijos, a modificar voluntariamente su régimen jurídico hasta su jubilación.