La hora del código (hour of code)

Seguramente cualquier persona ya se habrá dado cuenta de los enormes cambios que estamos viviendo en la sociedad actual, en gran medida, por el avance imparable de Internet y de todas las tecnologías y dispositivos que están en constante evolución y que nos acercan cada vez más deprisa a una sociedad en la que la información digital y la tecnología lo dominan todo.

Pero toda esa tecnología y los enormes volúmenes de información que manejamos hoy día no serían nada sin el «código», las cientos de miles y millones de líneas de código que son el alma de cualquier programa, aunque hoy día solemos referirnos a ellos como aplicaciones o Apps, un término que se ha popularizado en gran medida de la mano de los dispositivos móviles.

Y es que, si hace años parecía que lo más importante era disponer del ordenador más potente, o del teléfono móvil con la mejor cámara, lo cierto es que hoy en día, las aplicaciones y los programas se han convertido en los reyes de la tecnología.

Las aplicaciones son las herramientas que nos permiten navegar por Internet, buscar información, enviar un mensaje instantáneo, hacer una reserva, enviar un correo electrónico, volar a un Dron, obtener una fotografía perfectamente enfocada en condiciones de poca luz, conducir de forma autónoma un vehículo (…) y la lista es sencillamente interminable.

Una de las consecuencias mas importantes de la enorme demanda de mejores y más potentes aplicaciones, es la necesidad de contar con programadores, en definitiva, los creadores del código que hacen posible las aplicaciones que usamos hoy día a todas horas.

Es tal la demanda de programadores, que han aparecido iniciativas para fomentar el desarrollo de aplicaciones entre los más jóvenes, que en unos años podrían convertirse en los futuros ingenieros de software, los encargados de crear las aplicaciones del futuro. Una de las iniciativas más interesantes se inició con code.org, una organización sin ánimo de lucro dedicada a promover la participación en escuelas e institutos de las Ciencias de la Computación, con una especial atención en incrementar el número de mujeres y estudiantes de colectivos minoritarios que aprendan a programar.

Desde code.org se creó la iniciativa la hora del código, Hour of Code, a la cual se han unido compañías tan importantes como Microsoft, Apple, Amazon y otras organizaciones por todo el mundo, convirtiendo esta iniciativa en un movimiento global y sin precedentes.

Participar en la hora del código es muy sencillo, y además, cualquiera puede organizar un encuentro. En su web está todo lo necesario para llevarlo a cabo y lanzarte al mundo de la programación y animar a otros a hacerlo también, y como dicen en su web, puede participar cualquier persona, entre 4 y 104 años.

Si buscas una actividad profesional con mucho, mucho futuro, puede que encuentres la respuesta en la hora del código.

tbi