Estos días estamos asistiendo al mayor ejercicio de hipocresía que jamás se haya dado con relación a la inmigración. Un gobernante, Sánchez, que es como un político anuncio, en un gesto que le honra y ante la negativa de Italia a acoger a más de seiscientos inmigrantes, se ofreció a recibirles y atenderles en España. Muy bien (aplauso).
Los inmigrantes del AQUARIUS
Incluso muchos progres se ofenden si vas más allá de esta anécdota terrible del barco AQUARIUS. Si no eres sensible a esta cuestión, a este hecho, si no compartes el acogimiento en España de estas pobres gentes, si osas ir un poco más allá en el análisis, pasas al bando xenófobo, fascista o racista.
Ellos quieren quedarse en la superficie del problema porque asean sus conciencias, en general, o hacen publicidad de su opción política en particular (Sánchez).
Hay 5.600 millones de personas que se mueren de hambre en el mundo
Y NO PODEMOS PERMITIR QUE SE OLVIDE A LOS 5.600 MILLONES DE PERSONAS QUE ESTÁ PASANDO HAMBRE EN EL MUNDO, que son pobres de solemnidad, CON MENOS DE DOS EUROS DIARIOS para su subsistencia familiar.
Esos no importan porque no vienen, están allá en su tierra, muertos de hambre, sin expectativa alguna, a veces, de supervivencia. Los cuervos se les comen en el desierto y el mundo calla y sigue. Los gobiernos, las élites, conocen el problema y no hacen nada, absolutamente nada, en los lugares y países en los que se produce el problema que obliga a mucha gente a buscar, simplemente, sobrevivir.
¿Qué están haciendo por ellos?
Las ONG·s apenas alcanzan a cubrir el 1/1000000 de las necesidades médicas y materiales de los pobres del mundo. Los gobiernos corruptos de los países en los que tiene lugar el fenómeno se apropian de las ayudas que nunca llegan a los necesitados.
Las Instituciones Internacionales tampoco hacen nada. Dedican más tiempo a evitar la guerra de los monstruos gobernantes que a instrumentar la verdadera solidaridad. Se dedica más tiempo a la reunión de dos catetos, uno Coreano y otro Americano, para hacer publicidad de su grandeza negociadora. Mientras, el mundo pasa hambre y casi nunca sale en el telediario, a no ser que la imagen “venda” por su atrocidad, eso sí, advirtiéndonos antes de que las imágenes pueden herir nuestra “sensibilidad”. ¡Qué asco!
Recibiendo a más de seiscientos inmigrantes
Eso sí, recibiremos a seiscientos y pico inmigrantes. Enhorabuena. Y habrá gobernantes, próceres (ilustres, nobles, grandes), periodistas que darán buena cuenta del hecho. Ninguno hablará del problema real: 5.600 millones de personas en el mundo pasan hambre.
Nadie apuntará una solución para ellos que lleve la ayuda allí donde se produce el problema. Pero nuestra conciencia y orgullo como País quedará a salvo. Incluso algunos creen que, además de a Sánchez, esto beneficia a la marca España. Pues muy bien, hipócritas, no habéis solucionado nada excepto vuestra conciencia. Cuando volváis a casa ya podréis mirar a los ojos a vuestras mucamas creyéndoos dignos.
Esta es la auténtica realidad
Desde la más profunda tristeza, os invito a que veáis el vídeo adjunto. Merece la pena. Lo entenderéis todo, especialmente, cuánto hijo de puta va de solidario y se queda sólo en eso, sin siquiera una denuncia del verdadero problema.