El roscón con premio de Conrado se queda en León éste año, ya que los 10.000€ han ido a parar a David Pérez, de Riello, en un roscón que no llevaba ningún tipo de relleno. El cheque por tanto ésta Navidad, se ha quedado en la misma provincia de su origen, ya que el afortunado ganador compró, ésta misma semana, en la misma confitería Conrado de La Bañeza, tres roscones, siendo uno de ellos el premiado.
Cual sería la sorpresa para el agraciado, que al degustar el navideño dulce se encontró con el cheque de 10000€, que le convertía en el ganador del premio de éste 2022. El premio se entregará el mismo día de hoy, sobre las doce del mediodía, en la Confitería Conrado, de la localidad bañezana.
El roscón con premio fue encontrado el jueves, en la comida familiar de Reyes
El ganador, propietario del bar El Rincón de Manolo de Riello, en la montaña leonesa, se encontró con el premio, cuando iba a comer unos de los roscones, que había adquirido, el pasado jueves, en la comida familiar del día de Reyes. «Hacemos cada año una comida familiar en el bar y decidí probar suerte», «el hallazgo del premio fue completamente inesperado», ha declarado el afortunado hostelero, que adquirió los roscones para compartirlos entre las ocho personas de su familia, con las que tenía pensado celebrar el día de Reyes.
La Confitería Conrado ha escondido un año más el cheque de 10.000 euros entre los roscones de Reyes que se han vendido, entre el 15 de diciembre y el 6 de enero de 2022, una tradición que lleva realizando desde hace trece años y que le ha convertido en uno de los confiteros más reconocidos de todo el país, ya que envía sus productos por toda España y también a distintos países de Europa.
En su obrador se pueden adquirir diversas variedades de éste dulce típico navideño, como son el roscón clásico sin relleno, como el roscón con premio, el rellenado con nata, crema, sin fruta escarchada, trufa, cabello ángel o combinados, en su interior. Incluso ofrecen la opción de que el cliente pueda elegir el relleno a su gusto, siempre que sea posible.
Mar Morais