Los agentes de la BRISEC (Brigada de Seguridad Ciudadana), procedieron en la mañana de ayer a detener en el rastro dominical, a dos hombres que estaban vendiendo lo productos que habían sustraído en una casa de un pueblo leonés.
Fue la propietaria, que había denunciado el hecho los días previos en las dependencias de la Guardia Civil, quién reconoció los objetos en un puesto del mercadillo.
Entre los objetos a la venta estaba su ropa, libros, lámparas, figuras de cerámica, candelabros, jarrones, platos de alpaca, máscaras ornamentales y un sin fin de objetos más.
La mujer alerto a los cuerpos de seguridad, que detuvieron a los dos ladrones por los hechos expuestos. Los detenidos fueron trasladados a la Comisaría Provincial de la Policía Nacional que se hizo cargo de la investigación.