El Centro Penitenciario de Villahierrro ubicado en Mansilla de las Mulas (León) ha creado desconcierto y caos tras cuatro muertes en los últimos días, todos ellos jóvenes, menores de 30 años.
Todo empezó el lunes 16 de septiembre cuando una mujer se suicidó en su celda del Centro Penitenciario de Villahierro. Desde ese día hasta el pasado lunes, 23 de septiembre, cuatro personas han fallecido en el Centro Penitenciario de León.
El pasado jueves 19 de septiembre, tuvo lugar la segunda muerte. Esta vez fue un hombre, que falleció en la ambulancia de camino al Hospital de León. Parece ser que el interno de la cárcel leonesa ingirió una gran cantidad de barbitúricos según ‘La Nueva Crónica’ y esa ingesta le produjo un infarto por el que no pudo sobrevivir.
Al día siguiente, hubo otro suicidio de un hombre y el pasado lunes 23 de septiembre fue una mujer la que falleció quitándose la vida. Todos ellos, internos en el Centro Penitenciario de Villahierro (León) y jóvenes, menores de 30 años.
Todas las muertes pueden deberse a la falta de personal sanitario que hay en los centros penitenciarios porque ninguno de los fallecidos presentaba signos de violencia; aunque tampoco estaban en el programa de prevención de suicidios que hay en la penitenciaria de León.