La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) informa, a través de nota de prensa, que el Defensor del Pueblo ha respaldado a la queja efectuada por la AUGC ante el Consejo de la Guardia Civil donde denunciaba la existencia de irregularidades en los procesos selectivos para el ingreso en la Guardia Civil.
Según la AUGC, «dichas irregularidades suponen que existen aspirantes que superan la primera fase del proceso habiendo incluido datos falsos en su currículum, como titulaciones que no poseen, y que una vez detectadas dichas falsedades, y pese a que pierdan la baremación que éstas les añadían, continúan el proceso en su segunda fase sin sufrir mayores consecuencias».
Tras tener conocimiento de los hechos el Defensor del Pueblo ha verificado y cotejado todas las informaciones referentes al proceso y ha emitido una recomendación a la Dirección General de la Guardia Civil en la que indica que:
“al computar los méritos autobaremados por los aspirantes (sin ser cotejados por el tribunal calificador) para formar la puntuación total de la primera fase del proceso junto a la suma de las pruebas de conocimientos, ortografía, idioma y psicotécnica, se produce una estimación de los méritos que no es del todo real pues no refleja fielmente el peso específico y concreto de los mismos en la formación de la citada puntuación ya que no han sido previamente comprobados y por tanto el tribunal los computa y suma desconociendo su certeza y veracidad”.
La AUGC ha informado que el Defensor, en su comunicado a la Dirección General, expresa su perplejidad ante esa situación, dejando claro que “en base a criterios de racionalidad no se alcanza a comprender los motivos por los que se procede a cotejar a posteriori dichos méritos cuando estos forman parte de la primera fase y, al igual que la puntuación de las pruebas de la fase de oposición, deben responder a la realidad de cada aspirante y a criterios de fiabilidad”.
Desde la Asociación señalan a la Administración la necesidad de “verificar la realidad de los méritos autobaremados por los aspirantes en un estadio anterior para que, al ser computados para formar la puntuación de la primera fase, tuvieran una habilidad real y no desvirtuar, como ha sucedido en las últimas convocatorias, el número de candidatos que realmente deben pasar a la siguiente fase del proceso no dar lugar a disfunciones en su desarrollo”.