La chulería y prepotencia del conductor de León que aparca donde quiere

La chulería y prepotencia de este conductor de la ciudad de León, el cual aparca donde quiere, deja perplejos a todos que presenciaron la escena. Y no eran pocos, ya que el incidente tuvo lugar durante el día de hoy a las 14:30 horas de la tarde.

Provoca grandes colas de coches

Durante el día de hoy sobre las 14:30 horas de la tarde, hora punta en la ciudad de León, ha tenido lugar un incidente. El cual ha provocado que, durante varios minutos el buen tráfico de una céntrica calle de la ciudad de León se viera afectado.

El lugar donde se produjeron los hechos es la calle Plaza San Marcos, dirección el Auditorio Ciudad de León. Allí, según aseguran los testigos que presenciaron la escena, un vehículo deportivo se encontraba parado en el carril derecho. La puerta del conductor completamente abierta, así como la del maletero. Y por si esto fuera poco, sin la señalización de los cuatro intermitentes activada.

¿Qué se encontraba haciendo el conductor?

El conductor del vehículo se encontraba tranquilamente metiendo en el maletero de su coche unas bolsas de palas de pádel. El problema, tal y como aseguran los testigos es que, además de estar parado, al tener la puerta del conductor abierta, este no dejaba pasar a los demás coches.

Los testigos de dicho acto señalan que «estaba metiendo las bolsas con toda la pachorra del mundo». Como si estar aparcado allí fuera lo más legal y normal del mundo, y que los que lo estaban haciendo mal eran los demás conductores que estaban intentando pasar.

Chulería y prepotencia

Todos las personas que allí se encontraban, señalan la chulería y prepotencia con la que el conductor de León, según el mismo, aparca donde quiere. Ya que varios conductores de otros vehículos que allí se encontraban, le increparon por la cola que estaba formando.

Y la respuesta que estos recibieron dejó a todos los que allí se encontraban atónitos «a ver si ahora no voy a poder parar donde me de la gana». Encima de molestar a todos los demás conductores e impedir su paso y hacerlo con «toda la tranquilidad del mundo», este se ofende cuando le llaman la atención.

Pero la chulería y prepotencia no finaliza aquí, ya que, sabiendo que estaba molestando a mucha gente, podría haberse montado rápido en el coche o incluso cerrar la puerta del vehículo. Sin embargo, para respuesta de todos los que estaban presenciando la escena, nada de esto ocurrió.

Ya que acabó de meter y colocar todas sus cosas en el maletero y a continuación tal y como informan a este medio, cogió el coche y se fue dando un gran acelerón. Muchos opinan que este gesto fue provocado como burla hacia los demás conductores que estaban allí. Y que previamente le habían llamado la atención por su conducta.

Amanda Arroyo