El Chorizo de León busca la protección de Indicación Geográfica Protegida (IGP) dando el paso inicial
El famoso chorizo de León, reconocido por su sabor y calidad, se encuentra en camino de obtener la tan anhelada Indicación Geográfica Protegida (IGP). En los próximos días, los representantes del sector presentarán el pliego de condiciones ante la Junta de Castilla y León, paso inicial para conseguir esta distinción que garantizará su procedencia y autenticidad.
El proceso para obtener la IGP es riguroso y minucioso, requiriendo el cumplimiento de una serie de requisitos específicos que aseguren la calidad y singularidad del producto. Una vez entregado el pliego de condiciones al Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl), este deberá revisar y aprobar la documentación antes de remitirla al Ministerio de Agricultura.
El último paso en este largo camino será la aprobación definitiva por parte de la Comisión Europea, lo que puede llevar aproximadamente un año y medio. Sin embargo, el proceso es fundamental para salvaguardar la tradición y excelencia del chorizo de León y otorgar a los productores la protección y reconocimiento que merecen.
Productores de Chorizo de León
En la actualidad, el colectivo de la asociación de productores de chorizo de León está formado por alrededor de 16 empresas, de un total de 40 que se dedican a la producción de este delicioso embutido. Con la obtención de la IGP, se espera que más productores se sumen a esta asociación, contribuyendo a preservar las técnicas artesanales y la calidad que caracterizan al chorizo de León.
La Indicación Geográfica Protegida garantizará que solo aquellos chorizos elaborados en la región de León y siguiendo las tradiciones y técnicas locales puedan llevar esta denominación. Esto no solo beneficiará a los productores y a la economía local, sino que también proporcionará a los consumidores la tranquilidad de estar adquiriendo un producto auténtico y de calidad.
El chorizo de León es parte del patrimonio gastronómico de la región y su reconocimiento a nivel europeo elevará su prestigio y proyección en el mercado. El esfuerzo y compromiso de los productores para obtener esta distinción se traducirá en una mayor protección y valorización de esta deliciosa joya culinaria, asegurando su continuidad y prestigio en el tiempo.