Te contamos falsas creencias relacionadas con la dentadura de los niños
Corren por ahí muchos rumores acerca de los dientes de nuestros pequeños, vamos a ver cuáles son bulos y cuáles son reales para tratarles de la forma adecuada.
1. Bruxismo y Lombrices
Algunas veces hemos oído a nuestras abuelas que, cuando el niño rechina por las noches, tiene lombrices.
Se considera que, durante la dentición temporal, el rechinamiento de dientes es un patrón fisiológico, una forma que tiene el cuerpo de establecer a nivel neuromuscular ciertos movimientos. Es decir, que un niño rechine los dientes mientras duerme es «normal”, aunque se escuche desde la habitación contigua.
Para saber si son lombrices, lo más fácil es ir a tu médico. Él te informará en estos casos.
2. Untar apiretal en la encía.
Esta técnica está tan extendida que ya se ha convertido en una verdad absoluta. Cuando nuestros pequeños están con la erupción de sus dientes, cogemos y le untamos la dentadura con Apiretal y nos creemos que ya no sufrirá por ello.
La erupción de nuestros dientes de forma temporal no duele, y es un proceso fisiológico como el crecimiento de uñas y cabello. Los dientes no «rompen» la encía ni enhuesan». La erupción empieza intraútero, por lo que es casi imposible saber cuándo va a salir un diente.
Salvo que le des a tu hijo durante dos años este medicamento, es imposible saber si le ha hecho efecto.
Y lo más importante, la formulación farmacéutica del Apiretal no permite su absorción por vía mucosa. Es decir, no está haciendo efecto analgésico cuando se unta en la encía.
Si tu hijo está molesto, hacerle un masaje con el dedo le calmará bastante. Utiliza agua fría y tendrás el mismo efecto.
¿Cuándo te duele la cabEza te frotas la frente con ibuprofeno? ¿a quE no?
3. Collares de ambar
El ámbar es una resina fosilizada de origen vegetal, una piedra semipreciosa que se usa habitualmente en joyería. El ámbar tiene un precio relativamente elevado; los collares de bolitas amarillas, que se venden como tal por menos de diez euros, no son de ámbar auténtico. Un experto en joyería nos podría explicar mejor cómo distinguirlos.
Como cualquier “piedra”, el ámbar no tiene ninguna cualidad curativa o calmante científicamente demostrada. Me remito al apartado anterior, la erupción es un proceso fisiológico.
Añadir que existe un elevado riesgo de accidente si un niño menor de dos años lleva un collar. Está totalmente desaconsejado por el riesgo de ahorcamiento (al engancharse en cualquier sitio) o ahogamiento (si se rompe y traga una de las cuentas, aunque tengan nudos entre ellas, se pueden deshacer).
Estos son nuestros consejos de Clínica Dental Silva para estos bulos que circulan por ahí y que a veces estamos tan hartos de oírlos que no sabemos si es verdad o mentira.
Y a tÍ, ¿conoces algún bulo que hayas oído y que sepas que no es verdad? Cuéntanoslo y así ayudaremos a más gente a no dar por verdadero temas que nos dicen por aquí y por allá.
Digital de León