Ya son una realidad los Presupuestos Generales del Estado para 2023 cuyo borrador se ha hecho público este jueves. En este proyecto de Ley se puede ver el reparto de fondos para la inversión en carreteras que realiza el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
Se trata de una cuestión de verdadero interés, ya que, existen autovías y carreteras que dependen exclusivamente de estos fondos para poder desarrollarse y dar cabida a proyectos y tramos que abran paso o mejoren las comunicaciones con algunos puntos del país e incluso tramos que se encuentran actualmente en obras.
Resulta llamativo que mientras se destinan 102 millones de euros para la Autovía del Duero, otras carreteras importantes de la Comunidad de Castilla y León reciben partidas que en primera instancia parecen resultar insuficientes para acometer las obras correspondientes.
De esta forma, la A-60 que conecta León y Valladolid recibirá 2 millones de euros repartidos en los cuatro subtramos, que se encuentran en proyecto, entre Villanubla, La Mudarra, Medina de Rioseco, Mayorga, en Valladolid, y Santas Martas (León), con 500.000 euros cada uno. Una cantidad superior a la del ejercicio anterior, pero que aún así resulta escasa.
Por el contrario, si hay un aumento notable para la inversión en la A-76 que une Ponferrada y Orense con una partida de 2,5 millones de euros frente a los escasos 200.000 euros del año pasado. Por tanto, en principio se podrían acometer las obras llegando a los tramos bercianos 1,5 millones.