La campaña de uso del cinturón de seguridad y sistemas de retención infantil finalizó con el control de 1.648 vehículos (1.354 en 2017) en distintos puntos de la capital leonesa.
Han puesto especial atención a los horarios de entradas y salidas de colegios, observando la conducta de los padres que llevan a sus hijos a los centros educativos.
Esta campaña ha concluido con un total de 24 denuncias (51, en la anterior campaña) por no usar el cinturón de seguridad (20 conductores y 4 pasajeros). Unos datos muy positivos dado que suponen menos de la mitad de las sanciones puestas en la anterior campaña en la que además se realizaron menos controles.
El objetivo de esta campaña, llevada a cabo por el Ayuntamiento de León y la Jefatura Provincial de Tráfico, ha sido concienciar de la importancia que tiene el uso de sistemas de seguridad no sólo en las vías interurbanas sino también en las vías urbanas.
El Reglamento General de Circulación establece que los conductores y ocupantes de vehículos deben utilizar los cinturones de seguridad y otros sistemas de retención homologados correctamente abrochados tanto en la circulación por vías urbanas como interurbanas. Además, establece la prohibición de circular con menores de doce años situados en los asientos delanteros del vehículo, salvo que utilicen dispositivos homologados al efecto.
Excepcionalmente, cuando su estatura sea igual o superior a 135 centímetros, los menores de doce años podrán utilizar como tal dispositivo los propios cinturones de seguridad para adultos de los que estén dotados los asientos delanteros.
No cumplir esta norma es una infracción grave que conlleva una multa de 200 euros y la retirada de tres puntos del carné.