Tal y como ha avalado el Constitucional es legal pagar deudas con x oral, ya que para este «no tiene importancia constitucional suficiente», por ello decide archivar el caso en el que una mujer denuncia a su cuñado, el cual le había prestado dinero y la pedía que le realizara varias felaciones a lo largo de la semana mientras que la deuda se mantuviera.
Pagar deudas con x oral es legal
La polémica sentencia del Tribunal Constitucional se encuentra avalada por el Tribunal Superior de Justicia de Baleares, los cuáles fallaron en este sentido. Por lo que desde este momento, dos personas que sean mayores de edad van a estar legitimadas judicialmente para que la deuda contraída entre ambas partes se pueda satisfaces «en especies». Esto quiere decir que desde ahora se podrán pagar deudas con felaciones o relaciones sexuales como si se tratara de cualquier contrato contractual.
Esta es una historia que se remonta al mes de septiembre del año 2019, en ese momento una mujer decidió pedir ayuda económica a su excuñado debido a que tenía importantes problemas económicos. Después de que estos establecieron las condiciones del préstamo, la mujer recibió 15.000 euros, sin embargo no estipularon ningún plazo ni la cantidad de dinero que debería de darle para solventar la deuda, por lo que esta iba devolviéndole el dinero según podía.
La mujer asegura sentir miedo de su excuñado
Tal y como consta en la denuncia presentada por la mujer, a los días, el hombre le indicó que debido al favor económico que él le había hecho, ella debería hacerle entre dos y tres felaciones por semana. Se encontraron hasta en cinco ocasiones, la mujer explicó en la denuncia que sentía miedo de su excuñado ya que este le había dicho frases como:
«Si me haces lo que me gusta, no tienes ni puta idea de lo contenta que estarás de mí. Porque yo soy muy radical. Yo tanto puedo ser agresivo como vengativo. ¿Eres consciente de lo que te acabo de decir? No tengo muchas piedades el día que me pongo en plan de combate. No lo debes poner en duda».
La mujer, cansada de este tipo de vejaciones decidió contárselo a su madre y un amigo, cuando el hombre se enteró comenzó un acoso continuado a través de llamadas y mensajes amenazantes, los cuáles fueron presentados ante la Policía Nacional.
Luis Casado