Un hombre está siendo juzgado en Zaragoza por un maltrato a su bebé cuando tenía 4 meses de edad. El hombre admitió haberlo golpeado y zarandearlo porque no dejaba de llorar. A consecuencia de este maltrato el bebé que ahora tiene 13 meses está ciego y tiene importantes secuelas neurológicas.
El hombre de 41 años estaba al cuidado de su hijo de 4 meses y del hijo de su entonces pareja, de 9 años, cuando sucedieron los hechos. La falta de control y paciencia del padre marcarán por siempre el desarrollo del pequeño. La madre se encontraba trabajando en turno de noche y el padre estaba al cuidado de los menores. Según argumentó el varón el pequeño no le permitía dormir por lo que le zarandeó y le agarró de un brazo.
Los hechos fueron descubiertos por la abuela materna que se encargaba de los menores durante dos horas que los niños se quedaban solos debido al trabajo de los padres.
Maltrató a su bebé
El bebé tiene ceguera total en el ojo derecho y una pérdida de visión elevada en el izquierdo. Además sufre retraso psicomotor y madurativo. Aún no se conoce si sufrirá retraso mental u otro tipo de alteraciones, está en tratamiento y se desconoce como evolucionará.
La madre se encontraba trabajando cuando todo sucedió. Ambos se intercambiaron mensajes en los que el varón se quejaba del llanto del bebe y aseguraba que no sabía que hacer. La madre le recomendó mecerlo, tener paciencia y darle un biberón. Un par de horas después el hombre le indicó que había estado mal hasta el último momento y que se iba a trabajar. La abuela aseguró que notó que el bebé estaba asustado con la mirada «perdida hacia atrás» y apoyado en una toalla empapada en agua. Ante la situación le preguntó al hermano si había visto algo a lo que el niño le respondió que había oído un grito: ¡¡ya, cállate!!».
Al llegar la madre del niño del trabajo le notó unas marcas en la cara, en la nuca y en la frente y que no enfocaba la mirada. Le comunicó a su pareja que llevaba al bebé al hospital a lo que el hombre intentó que no hiciera porque afirmó que les denunciarían por dejar a los niños solos. Ella le respondió que estaban con su padre.
En el hospital confirmaron lo peor. El bebé sufría lo que se conoce síndrome del lactante zarandeado o traumatismo craneal por maltrato. En concreto, el niño presentaba equimosis en ambas mejillas en el pabellón auricular, una lesión en la parte cervical. Internamente, detectaron hematomas subdurales, retinomatía hemorrágica bilateral severa y encefalopatía aguda con crisis epilépticas.
El hombre fue detenido de inmediato y reconoció a su pareja que en un momento dado le había dado una bofetada y que le había sujetado fuerte de uno de los brazos y zarandeado con fuerza. La mujer rompió de inmediato y el juez le tomó declaración dejándole en libertad con la prohibición expresa de no acercarse al niño.
Se enfrenta a penas de 6 a 12 años de prisión.