La marcha de Ferrovial tiene consecuencias inminentes en la economía española
La decisión de Ferrovial de abandonar España debido a la subida de impuestos del Gobierno de Pedro Sánchez en el año 2020, es un precedente peligroso para la economía del país. Ferrovial ha anunciado su intención de trasladar su sede a Países Bajos, lo que supondrá una pérdida de 285 millones de impuestos para España. La empresa argumenta que la mayor parte de su negocio se genera en el extranjero y que se beneficiará de importantes beneficios fiscales al estar en Países Bajos, un país con una sólida solidez financiera y estabilidad económica.
La marcha de Ferrovial tendrá consecuencias inminentes en la economía española, incluyendo la posible salida de otros ejecutivos y multinacionales, lo que podría suponer una pérdida importante de recaudación de impuestos y la marcha de personas con un alto poder adquisitivo que dejarán de pagar impuestos en España. Todo esto puede llevar a una fuga empresarial y una pérdida de inversión en el país.
Es importante señalar que la marcha de empresas como Ferrovial no solo supone una pérdida económica para España, sino que también afecta a la reputación y la confianza en el país como lugar de inversión y negocios. La incertidumbre creada por la inestabilidad fiscal y económica puede desincentivar a otras empresas extranjeras a establecerse en España, lo que podría afectar negativamente al empleo y el crecimiento económico a largo plazo.
Parece crucial que las autoridades españolas busquen soluciones para mantener un equilibrio entre la recaudación fiscal y la competitividad empresarial, de modo que se puedan garantizar las condiciones adecuadas para la inversión y el crecimiento económico sostenible.