¿Apoyo o traición?
La guerra entre Rusia y Ucrania ha supuesto un cambio radical en el paradigma mundial. En un principio, no todos los países estaban a favor de tender la mano para evitar la invasión, siendo uno de ellos Israel, cuyo apoyo se ha especulado en varias ocasiones, resultando en una completa mentira que se ha sentido como una traición. Hace un par de semanas, el presidente Zelenski quiso entablar una conversación con este país, la cual que denegada al instante. Aunque a España también le costó lo suyo manifestar públicamente su contribución, se esperaba que los israelíes empatizasen con la causa y cambiasen la opinión política.
Irán no tiene muy buenas relaciones con Israel, y no parece que vayan a ir a mejor. Ahora que Rusia ha visto mermadas sus fuerzas, ha buscado aliados, entre los cuales, el primer país mencionado antes ha tendido su mano, por lo que, en consecuencia, Israel ha decidido posicionarse en el bando contrario. Esta decisión ha tomado a muchos por sorpresa. La sociedad opina que solo hacen esto por su redecilla y que no se implicarán totalmente, pensando que una traición a futuro no es algo descabellado.
El cambio de pensamiento ha surgido por la presión de Estados Unidos y la nueva alianza que hace peligrar la paz entre Israel e Irán, haciendo que hayan ofrecido ayuda para desviar los misiles con la implantación de un nuevo sistema de alerta. No obstante, se han mantenido tajantes respecto al envío de armamento.