Un estudio japonés ha comprobado que la BA.2 es más intenso que Ómicron en los cultivos de laboratorio y en los ratones. Esta variante es actualmente dominante en Dinamarca y los números de hospitalizaciones en este país van en aumento.
Esta variante de Ómicron, según los investigadores del estudio que se ha realizado, sería la variante con mayor capacidad de contagio y tendría la misma virulencia que las anteriores variantes, incluida la delta. Los investigadores creen que debería de ser la variante con mayor preocupación en cuanto a la salud global, ya que el riesgo de contagio es potencialmente mayor que con Ómicron.
La variante BA.2 puede llegar a ser la más preocupante hasta ahora
Si los investigadores llegan a confirmar estos resultados de la BA.2, perderíamos toda la ventaja que teníamos frente a Ómicron, en la que los síntomas eran mucho más leves que en las variantes que habían aparecido anteriormente. Además, podría escapar parcialmente a la inmunidad que generan las vacunas y también podría ser resistente a tratamientos como sotrovimab, un anticuerpo monoclonal que se emplea contra Ómicron.
Este estudio, pendiente de la revisión final para llegar a publicarse en una revista científica, indica que podría llegar a ser un virus peor que el BA.1 y se podría trasmitir mucho más rápido y podría causar síntomas más graves. Esta variante, también es conocida como «la Ómicron silenciosa» y es que esto se debe a que no aparece en las pruebas PCR como un fallo en el objetivo del gen S como si lo haría Ómicron, por lo que el primer paso que habría que realizar es idear un nuevo método con el que detectarlo.
Esta última variante, que está a punto de ser denominada con una letra griega por considerarlo como una variante de riesgo independiente, ha ido creciendo en las últimas semanas y ya se ha llegado a detectar en 74 países del mundo y sobre todo en 47 estados de Estados Unidos. En países como China, Dinamarca, India o Filipinas ya se ha vuelto como la variante dominante según un informe de la OMS.
Inés Alonso