La Primera RFEF, la categoría que iba a dar el impulso necesario a los clubs de la tercera categoría del fútbol español
La famosa Primera RFEF fue una de las revoluciones que decidió implementar el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, es decir, Luis Rubiales. El presidente de la RFEF quiso hacer un cambio radical en la estructura del fútbol modesto ya que, el sistema para ascender era muy complejo y quiso imitar el exitoso método del fútbol inglés donde está profesionalizado hasta la Cuarta División.
Durante la temporada 2020/2021 se vivió la última Segunda División B tal y como la conocíamos. En ella, debido a la pandemia, se restructuraron los grupos de forma que entraran los 102 equipos de la propia categoría, siendo una cantidad ingente de equipos en la tercera categoría del fútbol español. Esta última edición contó con dos fases de clasificación y un Play-Off final disputado en Extremadura donde el Ibiza, el Burgos, el Amorebieta y la Real Sociedad B lograron ascender a Segunda División.
Actualmente estamos viviendo la primera temporada de la Primera RFEF, categoría que se ha estrenado hace a penas unos meses y que está viendo como muchas de las promesas que se hicieron cuando se presentó la categoría, no se cumplieron. Como bien sabemos, la Primera RFEF está estructurada en dos grupos: el Grupo I al cual pertenece la Cultural y Deportiva Leonesa, el Deportivo de La Coruña, la UD Logroñés y el Racing de Santander, entre otros; y el Grupo II donde podemos encontrar conjuntos como el Sabadell, Albacete, Atlético Baleares, Villarreal B, entre otros.
Muchos de los equipos punteros creyeron las promesas iniciales que hizo la Real Federación de Fútbol Española acerca de los ingresos que iban a recibir por derechos televisivos. La realidad fue más dura, como realmente se esperaba ya que, eran promesas vacías. Muchos esperaban que DAZN se hiciera con los derechos de la Primera RFEF, pero al final volvió a ser Footters quién se hizo con ellos bautizando la categoría con su nombre. Por ello, los ingresos televisivos que han recibido los 40 equipos de la Primera RFEF son ínfimos en comparación de lo que se prometió en un inicio.
Hubo clubes que no se creyeron lo bien que pintaban esta nueva categoría y decidieron no excederse en los fichajes y gastar lo que sabían que podían invertir. Pero son muchos los equipos que se encuentran al borde de la quiebra antes de comenzar la segunda vuelta de la Primera RFEF, entre ellos el Extremadura y el CD Badajoz, dos conjuntos que contaban al inicio de la temporada con unas plantillas muy competitivas y unos salarios muy altos.
En nuestro caso, como medio digital de León, hay que hacer hincapié en lo bien que lo ha hecho la Cultural y Deportiva Leonesa. Es cierto que los resultados obtenidos no son lo que se esperaba, pero el club está saneado, paga a sus jugadores y puede inscribir nuevos fichajes en este mercado de invierno.
El Extremadura y el CD Badajoz endeudados en el año del estreno de la Primera RFEF
Uno de los problemas de esta nueva categoría, la Primera RFEF, es que, se prometió a los equipos lo que no se iba a dar. Algunos se lo creyeron y llevan meses sin pagar el sueldo a sus jugadores como es el caso del Extremadura y el CD Badajoz. Para todo amante del fútbol, el caso del club de Almendralejo es muy sonado ya que, estuvieron a punto de no ser inscritos en la Primera RFEF debido a los impagos que sufrían los futbolistas desde la anterior temporada.
Se pensaba que, en el Extremadura, apareciera un «salvador» que lograra sacar al club de la quiebra y pagase a sus jugadores, pero no fue así. Durante este mercado de fichajes invernal, la mayor parte de su plantilla decidió poner punto y final a su etapa en el Extremadura, como fue el caso de Kike Márquez, Saúl González y Fran Cruz. Quedando un equipo en cuadro que no se sabe si acabará siendo expulsado de la categoría al no contar con el mínimo de fichas profesionales.
El otro club donde hace a penas unos días, han salido los propios jugadores y el cuerpo técnico a dar una rueda de prensa es el CD Badajoz. El conjunto blanquinegro, que se quedó a las puertas de ascender a Segunda División en su propio estadio, el Nuevo Vivero, está viviendo una situación dramática. Al comenzar la temporada, su presidente, Joaquín Parra, se vio envuelto en una serie de problemas legales que han afectado al club donde los jugadores aseguran haber llegado al límite.
Es tal la situación en Badajoz, donde hay jugadores de gran nivel como es el caso de Barri, Benito, Zelu, Aquino, entre otros, que los propios jugadores han propuesto al club viajar a domicilio en sus coches particulares al carecer de recursos mínimos en el club. La situación se torna más complicada cuando algunos jugadores afirman no poder pagar sus alquileres al no recibir el salario que les corresponde.
Esta situación, por desgracia, se está convirtiendo en algo habitual dentro de la Primera RFEF donde además de tener que evitar el descenso a la Segunda RFEF, hay que tratar de no endeudarse porque eso implica la desaparición de clubs históricos. Por lo que, esperamos que durante los próximos meses se solucione de la mejor forma posible tanto el caso del Extremadura como el del Badajoz y la Primera RFEF sea esa categoría de fútbol profesional que prometió Rubiales.
Laura Aller