El Ciudad de Logroño asalta el Palacio de los Deportes
El Abanca Ademar se midió al Ciudad de Logroño en la segunda jornada de la Liga Sacyr-ASOBAL, siendo el feudo del conjunto leonés el elegido para disputar este importante encuentro que pudo aupar a los maristas a los puestos altos de la clasificación. Tras haber logrado una primera victoria crucial ante el recién ascendido BM Guadalajara, los de Manolo Cadenas querían volver a sumar una victoria para confirmar las buenas sensaciones que dio el equipo durante la pretemporada ante conjuntos que disputan competición europea.
Los de Manolo Cadenas cayeron derrotados por un duro 34-38 frente al Ciudad de Logroño en el Palacio de los Deportes, siendo una derrota dolorosa para los maristas.
La fragilidad defensiva del Ademar volvió a ser un «debe» frente al Ciudad de Logroño
Los de Manolo Cadenas comenzaron enchufados frente al Ciudad de Logroño llegando a ponerse incluso tres goles por delante, pero de nuevo, la fragilidad defensiva les llevó a que los riojanos les empataran antes de lo previsto. Un equipo mucho más enchufado que lo que se vio la temporada pasada en el Palacio de los Deportes, a pesar de llevar gran cantidad de partidos ganados como locales en los últimos encuentros.
David Fernández fue uno de los más activos durante la primera mitad, anotando siete tantos que fueron vitales para el devenir del encuentro. En cambio, los riojanos fueron capaces de neutralizar a uno de los mejores jugadores del Abanca Ademar durante la primera jornada, si no el mejor, Antonio Martínez, que vio como la defensa visitante fue capaz de evitar que los balones le llegaran a él, al número «24». Cabe destacar la gran actuación de Juan Castro que, una vez más, desde segunda línea fue capaz de fulminar al meta rival con sus fuertes disparos.
Un penalti errado por Antonio Martínez llevó a que Boskos fuera el elegido para lanzar la siguiente pena máxima, marcándola sin problemas y poniendo a los suyos por delante (10-9), en un partido donde la fragilidad defensiva se volvió a hacer notar y tan solo, el meta griego, fue capaz de frenar esa sangría con tres sorprendentes paradas antes de que el Ademar diera entrada al canterano Carlos Honrado.
Los maristas se fueron al descanso perdiendo por cuatro goles (16-20), siendo un auténtico varapalo para el conjunto leonés haber comenzado de tal manera ante los suyos, con un Palacio de los Deportes que mostraba una gran entrada en este primer partido de la temporada como locales.
Un mal inicio de la segunda mitad dejó temblando al Abanca Ademar
Los de Manolo Cadenas salieron a disputar los segundos treinta minutos mostrando una de sus peores versiones, llegando a ir incluso seis tantos por debajo en el marcador. El paso por los vestuarios no sentó bien al conjunto marista y se notó en los primeros minutos de la segunda mitad, a mayores hay que destacar lo «flojo» que estuvo Panos bajo palos, notándose que todavía le falta «algo» para ser el arquero indiscutible de este conjunto que aspira, mínimo a entrar en Europa esta temporada.
El Ademar luchó hasta el final llegándose a poner a tan solo un gol de distancia en el marcador
El conjunto marista tiró de garra y corazón durante los últimos minutos de partido, llegando incluso a ponerse a tan solo un gol de distancia del Ciudad de Logroño, pero un penalti más que discutible a favor de los riojanos volvió a alejar a los de Cadenas de hacerse con la victoria en un partido caótico. Las malas decisiones en ataque cuando se pudo recortar la distancia en el marcador marcaron a un Ademar que suma su primera derrota como local en la segunda jornada de la Liga Sacyr-ASOBAL.
Los de Manolo Cadenas no pudieron dar la vuelta al resultado adverso a pesar de la gran actuación de David Fernández, dejando un mal sabor de boca a una afición que no se podía creer que los suyos volvieran a caer como locales ante el Ciudad de Logroño, como pasó hace una temporada.
